miércoles, 18 de enero de 2017

BRUJERÍA 
DEPARTAMENTO MAGDALENA.
Misterio del Hombre Caimán. 
Plato Magdalena.

LA BRUJERÍA DEL "NIÑO EN CRUZ" EN PLATO: El "Niño en Cruz" es conocido en el mundo del esoterismo como la aseguranza que le realiza un brujo a una persona a través de cruces tatuadas en la espalda y en las extremidades del cuerpo para aumentar la fortaleza física y para no morir en situaciones de peligro extremo.
“EL NIÑO EN CRUZ” DE ELÍAS CARBONELL: A este clan de la época perteneció Elías Carbonell, quien con su "Niño en Cruz", tenía poderes sobrenaturales provenientes de pactos con el diablo. Elías Carbonell, nació en el caserío de Zarate, jurisdicción Plato Magdalena, donde sus hazañas le dieron renombre, la más notable fue haber matado un tigre utilizando como arma sus prodigiosas y potentes manos.
“EL AMIGUITO” DE PLATO: Brujo oriundo del caserío de Las Mulas, jurisdicción en esa época de Plato Magdalena, quien con sus poderes ocultos evocaba espíritu de los muertos y se transformaba en animales. Fue “El Amiguito”, quien convirtió al botánico Prospero Acuña Villalobos, oriundo de Nueva Granada Magdalena en tigre.
“CHILOLO” ISIDORO MEJÍA: Plateño de nacimiento, más conocido como “Chilolo”. Su secreto consistía en trabajar labores del campo solo, porque así les rendía más el trabajo. “Chilolo”, clavaba como si fueran puntales, madrinas o postes, que cuatro mozos de perrenque no habrían movido siquiera.
“FELITO” FÉLIX CARRANZA: “Felito”, natural de Plato, con sus potentes brazos embrujados por “El Niño en Cruz”, desmontaba un potrero de cien hectáreas en una hora.
GREGORIO “GOYO” HERNÁNDEZ BUELVAS: Hijo del también acordeonero plateño Melchor Eloy Hernández Batista, casado con su madre Nicolasa Buelvas. "Goyo" Hernández, nació en el año 1871 y fue uno de los primeros en tocar acordeón en la región de Plato; hombre misterioso o brujo, que vestía de negro o blanco y dormía en su extensa finca ganadera El Topacio, en un cuero de vaca negra, rodeado de perros. De él se dice que tenía pactos con el diablo, confirmando con esto, que el hechicero y el músico eran una misma persona, que el arte musical era un estado de magia.
RAFAEL GALINDO: Era oriundo de Santana Magdalena, se caracterizó por ser capaz de frenar tomándolo con sus potentes manos por los cuernos, la embestida de un toro cimarrón de 40 arrobas; el cual levantaba en vilo, tiraba contra el suelo y en un santiamén le amarraba las 4 patas.

HOMBRES MISTERIOSOS,
EN EL PIÑÓN MAGDALENA.
Prudencio De La Hoz. 
´De Tiogollo Magdalena.

PRUDENCIO DE LA HOZ, MEDICO BOTÁNICO Y CLARIVIDENTE: Prudencio De La Hoz, nació en el caserío de Tiogollo, municipio El Piñón Magdalena, en los últimos años del siglo XIX. Desde su juventud se esmeró en el conocimiento de las plantas, utilizándolas al servicio de la medicina a través de remedios naturales, por medio de los cuales curaba enfermedades. Además de médico empírico, tenía el don de la clarividencia y era conocido como un médico que realizaba milagros. En sus andanzas de médico de renombre, conoció en Cantagallar Magdalena a la profesora Eva Cervera (Oriunda de Cerro San Antonio Magdalena), población donde unieron nupcias y donde nació su única hija Carmen De La Hoz Cervera. Eva Cervera, natural de Cerro San Antonio Magdalena, se residenció en Cantagallar como una de las primeras profesoras de la localidad. Nació del tronco del cerrano Julián Cervera y tuvo los siguientes hermanos: Joaquín Cervera, se casó en Cantagallar con Zunilda Calvo Pérez. Juana Cervera, se casó en Cantagallar con Manuel María de la Rosa. “Conchita” Cervera, se casó en Cantagallar con Santos Calvo.
MANUEL FRANCISCO GARCÍA, MÉDICO QUE CURABA CON SECRETOS: A mediados del siglo XX, existió en el corregimiento de Sabanas, municipio de El Piñón Magdalena, un médico empírico que curaba a las personas con secretos, hijo de “La Niña” García. Sus conocimientos médicos los adopta luego de tomar posesión del espíritu del fallecido médico pivijayero Santander Herrera. Fueron muchos los aciertos que tuvo Manuel Francisco García, en la región del Magdalena. Atendía los pacientes acompañado de una botella de ron. Concentrado en el patio de la casa hacía un rezo riguroso, en ese momento de concentración diagnosticaba si el enfermo tenía cura. Santander Herrera Orozco, fue un prestigioso médico de comienzos del siglo XX en Pivijay Magdalena. Hoy día el hospital de esa localidad lleva su nombre.
JOSÉ “JOCHE” VALENCIA: El camión “La Babilla”, cuyo propietario oriundo de Salamina Magdalena, le decían “Mis Ojitos”, porque el chofer tenía los ojos adormitados. Vehículo que transportaba pasajeros de Salamina a El Piñón y viceversa, la mayoría pacientes del médico botánico “Joche” Valencia, a quien le profesaban fe profunda.
NICASIO ROMO: Oriundo de El Piñón y maestro en las artes de la botánica y rezos de sanación. Nicasio Romo, casado con Petrona Hernández, tuvieron de hijo a José Manuel Romo Hernández. José Manuel Romo Hernández, se casó con Aurelia Cantillo Acosta, tuvieron un hijo de nombre Alberto E. Romo Cantillo, este a su vez padre de Oscar Romo.
ENIGMATICO JOSÉ ARATO: Desde mediado del siglo XX, comerciaba en El Piñón Magdalena el enigmático José Arato, de sangre italiana, y padre de José Miguel, Humberto, Luz Marina, Antenor. Vivía en casa de esquina en el Barrio Abajo, en donde vendía víveres y aperos para caballos, además de ser prestamista. Una uña larga en su dedo gordo delataba su mundo oscuro. De él se decía que tenía pacto con el diablo, personaje que se presentaba a su casa montado en caballo y con el cual tomaba tragos de ron. Durante esas parrandas con el diablo, hacía un pósito en la sala, llenándolo de cerveza, de inmediato un gato negro lo achicaba.  
EL SUSTO DE PEDRO ANTONIO MÁRQUEZ: La viuda Matea mandó a su trabajador a cargas dos cajas de aguas del Río Magdalena, para labores domésticas de su residencia en El Piñón Magdalena, con tan mala suerte que una de las cajas de madera repleta de agua, cayó sobre el pie derecho de su peón. Ante este incidente su patrona pidió a San Pedro Mártir de Verona que si el joven se curaba le quemaba una caja de espermas en la puerta de la iglesia. Ocurrió que el joven murió y la viuda Matea no cumplió la promesa de la “manda” hecha al patrono del pueblo. Poco tiempo después Pedro Antonio Márquez, esposo de Dolores Fandiño Rangel, reposaba una pea de 4 días de fiestas patronales en su finca cercana a la población, cuando escuchó quejidos profundos. Ante esto Pedro A. Márquez, preguntó:
- “Eres de esta vida o, de la otra”.
El desconocido invisible le contestó:
- “De la otra”.
Pedro A. Márquez, ante semejante respuesta, asustado y nervioso le volvió a preguntar:
- “Que quieres”.
El desconocido invisible le volvió a responder:
- “Dile a la viuda Matea, que desde que me morí no le visto la cara a Dios, porque ella no le ha quemado la caja de esperma a San Pedro Mártir de Verona. No sabe ella lo que me ha tocado sufrir, que estoy a las puertas del infierno”.
El piñonero Pedro Antonio Márquez, lleno de escalofríos salió corriendo para la casa de la viuda Matea y desde la puerta le grito:
- “Viuda de mierda mira en lo que me has metido, te manda a decir tu difunto trabajador que le pagues la “manda” a San Pedro, que por tu incumplimiento todavía es hora que no le ha visto la cara a Dios”. 
"EL NIÑO EN CRUZ" EN LA POBLACIÓN DE EL PIÑÓN: Pepe Márquez, de un cigarrillo hacía un billete.
José Manuel Vizcaíno: “Chocolate”, como le decían popularmente, aguantaba a un Jeep en marcha.
Joselito De La Hoz de Ávila: Nunca perdió una pelea, porque tenía “El Niño en Cruz”.
José de los Santos Gutiérrez: Su “Niño en Cruz”, le permitía borracho, en las fiestas de carralejas, enfrentársele a los toros más valientes, de tal manera que los tumbaba y les quitaba los premios y nunca tuvo un accidente. Subía una pieza de madera de 50 o 60 centímetros de ancho por 2 metros de largo, con un peso de una tonelada, a una altura de dos metros, madera que aserraban para vender sus tablas.
Almanza: Famoso asaltante de camino por los caminos de Cantagallar, El Piñón y Cerro San Antonio Magdalena; decían que tenía “El Niño en Cruz”, porque cuando estaba a punto de ser apresado, se escondía en un árbol delgado y nadie lo veía.
Juan Cantillo: Al igual que Almanza, era el terror de los caminos veredales, fue un gran  salteador que tenía pactos con el diablo. 
ENIGMAS EN TIERRAS PIÑONERAS: El sector comprendido entre la cabecera municipal y el corregimiento de Cantagallar a través de la historia ha sido un territorio misterioso en el municipio de El Piñón Magdalena.
La "Lamparita" de la finca El Olivo: En la finca “El Olivo” cerca de los predios del colegio agropecuario, se hizo famosa la llamada “Lamparita”, que en horas de la noche veían caminando sobre la hierba y que con su luz alumbraba todo el potrero, espantaba y hacía bramar al ganado y correr a más de un ser humano. También era observada en las siguientes fincas: "El Bongo", "San Carlos", "Mayorquín", "La Legua", "La Camorra". Se comenta que era como las luces de un carro y a medida que se acercaba iluminaba todo el sector. Era una luz intensa, brillante. 
Venteadoras de arroz en las "Puertas Mellas": Por el antiguo camino El Piñón-Cantagallar, llegando a la finca “El Bongo”, se encontraban las "Puertas Mellas”, construidas de hierro y pintadas de rojo; misterioso sitio, donde a cualquier hora los transeúntes observaban dos mujeres venteando arroz.  
"Entierro Indígena" en Caño Ciego: También se observaba en horas de la noche el “Entierro indígena”, era un desfile de personas con mechones encendidos en las manos que recorrían la ribera del Caño Ciego, a la altura del puente, muy cerca del corregimiento de Cantagallar Magdalena. 
“El Caballo sin Cabeza”: Por la esquina del comerciante José Arato, en la cabecera municipal, salía un caballo sin cabeza. 
“La Vende Hueso”: Este enigmático personaje salía en la Escuela Urbana de Varones de El Piñón. Era una señora con una ponchera en la cabeza vendiendo hueso por ese sector.

BRUJERÍA
EN LA POBLACIÓN DE CANTAGALLAR.
"El Pillo".
Gabriel Crespo.

GABRIEL “EL PILLO” CRESPO: Curandero de culebras, no solo con brebajes y plantas, sino también con rezos. Poderes hereditarios de su padre “El Mello” Crespo Bernal, esposo de Candelaria Hernández, en Cantagallar Magdalena. 
LA BRUJERÍA DE "GOLLO" GONZÁLEZ: Por los años 30 del siglo XX "Goyo González", se fue con su padre a trabajar en la Zona Bananera. Todo marchaba bien hasta el día que dos individuos asesinaron a su padre que se encontraba solo en su rancho, para robarle los jornales de trabajo. Habían pasado escasos 5 minutos cuando regresó "Goyo", encontrando a su progenitor recién muerto y un vecino le dijo: "Por ahí cerquita van los dos tipos que lo mataron". De inmediato cogió la "chambelona" con que cortaba el guineo y salió corriendo tras los malhechores, a quienes alcanzó no muy lejos del sitio de la tragedia. Corriendo mató al primero, cortándole la cabeza con un machetazo al aire; siguió tras el segundo, que en el desespero se resbaló cayendo al suelo, allí lo hizo picadillo con el machete. Después de haber pagado cárcel por los crímenes cometidos, "Goyo González", regresó a su pueblo Cantagallar. No había pasado mucho tiempo de estar en su pueblo cuando empezó el martirio de toda su vida: Un demonio lo perseguía por donde quiera andaba. La primera señal del mal presagio ocurrió una mañana, cuando sentado en el patio de su casa, un pájaro raro pasó sobre su cabeza silbando. En la noche de ese día, estando acostado con su mujer María De La Cruz, recordó perplejo y asustado, porque a su lado se encontraba un gato negro que lo miraba con unos diabólicos ojos azules. Al día siguiente pasó lo mismo, pero esta vez quien estaba acostado a su lado era una serpiente parecida a una boa. Así pasaba las noches cuando no era un gato, era una serpiente, un perro o cualquier animal que se le aparecía en la cama donde estaba durmiendo. Por esta circunstancia su esposa María De La Cruz, lo abandonó; y por esta circunstancia adoptó la estrategia de cambiar permanentemente de dormitorio, cosa que no funcionó por que donde quiera que se escondía era detectado en el día por el pájaro raro que le silbaba sobre su cabeza, y en la noche por los animales que se le acostaban a su lado para no dejarlo dormir. Cansado de esta situación abandonó su pueblo y se fue a vivir a Fundación Magdalena, en donde también le ocurría la misma pesadilla. Estando en Fundación, cambio su religión católica por la evangélica, única forma que pudo deshacerse del demonio.
LA BRUJERÍA DE "FICO" GONZÁLEZ: Al igual que su hermano "Gollo" González, "Fico" tenía pacto con el diablo. Se dice que fue quien le transfirió los Animes a su pariente Francisco González.
LOS ANIMES DE FRANCISCO GONZÁLEZ: A Francisco González, lo perseguían Los Animes, animalitos boca colorá que le dañaban sus cosas. 
LA BRUJERÍA DE JUVENAL FANDIÑO: Vivió en el pueblo Juvenal Fandiño Rodríguez, esposo de Modesta Rangel Barros; pues bien, este señor conseguía las mujeres con secretos, tenía el secreto del pájaro macúa.
CONCEPCION OROZCO (MAMA CHON): Bajita de estatura, cuerpo corpulento, color moreno, fiestera y bruja. Concepción Orozco aprendió el arte de la brujería de sus antepasados, ya que el pueblo de Cantagallar históricamente ha tenido fama de hechicería. MAMA CHON fue una mujer parrandera, borrachona, y de mucha diversión, en cierta ocasión dispuso irse a parrandear una fiesta en el caserío de Coco Solo, en la madrugada de regreso a Cantagallar cuando ya iba llegando al pueblo, se encontró un cajón con velas encendidas en mitad del camino, ella de inmediato se le sentó encima hasta beberse la botella de Ron. La otra bruja que estaba dentro del cajón en vista que llegaba la claridad del día, y Concepción Orozco no la dejaba ir, se le presentó con nombre propio y le suplicó que la dejara tranquila. MAMA CHON accedió al pedido y se fue a dormir borracha en la troja que tenía en el patio de su casa, la otra bruja aprovechó el estado de embriaguez de su contendora y en un acto cobarde y de venganza, le jaló el dedo grueso del pie izquierdo, dejándola muerta instantáneamente. 
EDUARDO SARMIENTO: Le decían “Malos Ratos”, o “El Perro Negro”, nació en Campo de la Cruz, pero se crió en Cantagallar, población donde se casó con Andrea Calvo. Tenía la particularidad que se acostaba en Cantagallar Magdalena y al día siguiente amanecía tomando tinto en Campo de la Cruz Atlántico, después de haber atravesado nadando el Río Magdalena, convertido en perro. Le faltaba el respeto a los Policías, estos lo buscaban y no lo veían. De modo que él borracho de ellos se burlaba y riéndose les decía:
- A la Policía la compro por 10 pesos y a los inspectores por 5 pesos.  
ZENOBIA, LA PECOSA: Llegó a Cantagallar una profesora pecosa llamada Aura. A Zenobia, la esposa de Goyito Urina, le causó admiración la piel de la profesora, formando carcajadas de burlas. Ocurrió que a los pocos días la piel de Zenobia, quedó como la de Aura, la profesora.
EL BRUJO: Este sector de Cantagallar se llama así, porque en el lugar salía un espanto.

EL HOMBRE CONVERTIDO EN BURRO
EN FUNDACIÓN MAGDALENA.
El hombre burro 
en Fundación Magdalena.

El mulato y corpulento jornalero Santander Martínez, había nacido en 1880 en Haticos Guajira. A la edad de 20 años se enamoró de la hermosa Otilia María Villa, hija de Natividad Argote, una acaudalada matrona del pueblo, con poderes mágicos de brujería. A Natividad Argote, nunca le pareció al mulato Santander Martínez, como el príncipe que siempre soñó para su hija. Pero el amor es así: Otilia, desde el día que lo vio rezando el padre nuestro en la fiesta patronal, sintió que su alma entró al de ella. Empezaron sus amoríos, pero como la madre se oponía, Otilia María Villa, optó por “salirse” con su amado jornalero. Desde entonces fueron felices, la matrona Natividad Argote, al verse vencida no tuvo más remedios que aceptar al nuevo matrimonio en su casa. Vivienda donde empezó la maldición de Santander Martínez, ya que la acaudalada matrona del pueblo, con poderes mágicos de brujería, aprovechó el escenario para convertir en burro al mulato jornalero. Un domingo primaveral en horas de la tarde Santander Martínez, compartía tragos con vecinos amigos frente a su residencia, en el momento pidió permiso para orinar. Sus compañeros de parranda quedaron absortos cuando escucharon el rebuznar de un burro grande y negro que salió corriendo y peando del baño, perdiéndose en los trupillales de Haticos Guajira. Desde entonces se perdió Santander Martínez del pueblo guajiro. En la región solían comentar de la existencia de un burro que había adquirido fama en las estribaciones de la Sierra Nevada, por su fuerza y voluntariedad para el trabajo; pero cuando Otilia María Villa, llegó a la finca indagando por el animal, ya había sido vendido a un señor desconocido. La esposa sin hijos, después de 30 años de búsqueda se dio por vencida y se resignó al sufrimiento, muriendo al poco tiempo. En la plaza de mercado de Fundación Magdalena, los domingos frecuentaba un campesino montado en un burro grande y negro, procedente de las montañas aledañas, que luego de hacer las compras semanales se marchaba por el mismo camino. Joaco Bonet Camacho, enigmático personaje que vendía carne en el mercado, siempre le llamó la atención el burro grande y negro, al cual notaba cansado, viejo y con algo por dentro que no era de animal. Un domingo le dijo a su compañero de ventas en el mercado:
- Compa, ese burro es un pobre hombre.
Su compañero sorprendido exclamó:
- Hombe!
Al domingo siguiente Joaco Bonet Camacho, le dijo a su compadre de venta que hasta ese día el pobre hombre dejaría de ser burro. Efectivamente a las 10 de la mañana como de costumbre, llegó al mercado de Fundación Magdalena, el campesino montado en su burro grande y negro, procedente de las montañas aledañas. Entonces Joaco Bonet Camacho, fijó en el burro su mirada penetrante y constante por algo más de una hora; mirada con fuente de poder, bien lo dice el dicho popular, que los ojos son el espejo del alma. A la hora de su mirada prodigiosa, lentamente aparecía un anciano hombre, canoso y arrugado, que se desprendía del alma maldita de un burro embrujado, ante la mirada atónita del público presente. En ese momento volvió a nacer el mulato y corpulento jornalero Santander Martínez, que había nacido en 1880 en Haticos Guajira; pero ya no servía para nada, las ñoñas en el espinazo, manos y rodillas, presagiaba que le quedaba pocos días de vida.

EL DEMONIO DE ENRIQUE CABARCAS,
EN SEVILLA MAGDALENA.
Enrique Cabarcas, esposo de Ángela Altamar, era un brujo que durante su larga vida tuvo pacto con el diablo y se transformaba en animal. En 1976, murió siendo sepultado en el cementerio San José de Kennedy de Sevilla Magdalena. A los 5 años su tumba fue abierta para trasladar sus restos a otra bóveda, pero sucedió lo inesperado: Fue encontrado tal cual como fue sepultado, como si el tiempo no hubiera transcurrido. A los 10 años, la curiosidad de los pobladores motivó abrir nuevamente su tumba; para entonces, tenía las uñas larga, los colmillos grandes, el cuerpo velludo y una cabellera blanca envejecida.

INFLUENCIA DE LA LUNA.
Misterios 
de las fases de la luna.

LUNACIONES: Las fases lunares se producen por la interacción entre los movimientos del sol, la luna y la tierra. En un año la luna realiza trece recorridos en torno a la tierra, es decir trece lunaciones. Cada lunación tiene una duración de 28 días aproximadamente. Conocemos cuatro tipos de fase lunar, que son la Luna Nueva, Cuarto Creciente, Luna Llena y Cuarto Menguante. La influencia de la luna es observada desde la antigüedad. En la naturaleza, la luna mueve las grandes masas oceánicas de la tierra, las mareas y el agua en general. Más de 85% del cuerpo humano está compuesto de agua, la luna influye en el cuerpo y en las emociones. En las mujeres rige el útero, el ciclo de menstruación, de gestación y las mamas con que se alimentan los hijos. La luna alimenta la imaginación, los sueños. La luna influye en el desarrollo de los hongos.
FASE LUNA NUEVA: Se aconseja eliminar las malas hierbas, se quitan las hojas marchitas, y no se riegan las plantas de interior. Además, conviene abonar y arar el suelo. Es también una fase óptima para la siembra de césped, si se acompaña de tiempo lluvioso. 
FASE CUARTO CRECIENTE: Las plantas poseen más resistencia frente a las plagas y enfermedades. El aumento de la luz lunar facilita la germinación de las semillas.
FASE CUARTO MENGUANTE: Es la mejor para realizar trasplantes y acabar con los insectos y las malas hierbas.
FASE LUNA LLENA: La madera sana y resistente se obtiene talando árboles en Luna Llena.  Como dice la canción de Leandro Díaz: "Los pasos que da la luna, los da la mujer también".