JIMÉNEZ LÓPEZ
PINTOR PIJIÑERO.
Autoretrato
Pintor Edgar Francisco.
ESTUDIOS: Edgar Francisco Jiménez López, artista plástico, nació en Pijiño, Magdalena, en el año 1951. Estudió Pintura en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá, de 1971 a 1977. Estudió grabado al agua fuerte y al buril en París. También estudió litografía en la Escuela de Artes y Oficios de Barcelona, España, de 1981 a 1982. Estudió Cerámica en el “Fringe Club” de Hong Kong. En 1983 obtuvo una beca del convenio cultural Colombo Chino, para realizar estudios de post-grado en Pintura China Tradicional en la Academia Central de Bellas Artes de Beijing Pekín.
6 junio 2025, Bogotá.
participó e Bienal Internacional de Arte Suba
en la Biblioteca Julio Mario Santodomingo
DOCENTE.
Profesor de Dibujo y Pintura en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Jorge Tadeo Lozano en Bogotá. Profesor de Arte en el Liceo Francés de Beijing, de 1985 a 1986. En Hong Kong fue profesor de Arte del Liceo Francés y del “Art Centre” donde enseñó “Expresión con tinta China”.
EXHIBICIONES.
Sus trabajos se encuentran exhibidos en colecciones permanentes en el Museo de Artes Gráficas y el Instituto Zuliano-Americano de Maracaibo (Venezuela), la Academia de Bellas Artes de Beijing (China), el Centro Cultural de Hong Kong, la Colección de arte de Ciba Geigy de Hong Kong, los Consulados Generales de Colombia en Nueva York, Toronto, Miami y Hong Kong. Las Embajadas de Colombia y de Venezuela en Beijing (China), la Embajada de Ecuador en Berlín, Alemania. La Escuela Internacional en Berlín Alemania. El Museo Bolivariano de Arte Contemporáneo de Santa Marta. El Museo de Arte Institucional de Comfamiliar, Barranquilla. El Museo Casa de la Cultura Ecuatoriana “Benjamín Carrión” en Quito, Ecuador. El Museo del Hombre Dominicano en Santo Domingo, República Dominicana. El World Trade Center Club, Taipei, Taiwán. La Colección de Arte de Proexport, Toronto, Canadá. La colección de arte de Fenalco, Bogotá. La colección de arte contemporáneo de la Opera House de El Cairo, Egipto. Mural e instalación hechos a cuatro manos con Carlos Aranha (artista ecuatoriano) en el Center for Research on Womens Health, Toronto, Canadá. En colecciones corporativas y privadas en diferentes países.
REGRESO A COLOMBIA.
Después de vivir 12 años en Asia, se trasladó a Toronto, Canadá en 1995, allí fue miembro fundador de los grupos de artistas visuales “JIRART” y “Zografi” de Toronto, donde vivió hasta el 2006, cuando se regresó a vivir en Bogotá, donde reside en la actualidad.
OPINIONES.
1. Eduardo Márceles Daconte, escritor, curador e historiador del arte, sobre el pintor Edgar Francisco Jiménez López manifiesta lo siguiente en el año 2011:
- "Además de artista visual, Edgar Francisko Jiménez es un trotamundos que ha dejado en cada país visitado la huella de su producción artística. Esta exposición retrospectiva en el Museo Bolivariano de Arte Contemporáneo de Santa Marta, celebra 40 años de vida artística, remontándose a 1973 cuando, por primera vez, estando aún en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de Bogotá, exhibió sus obras en el Salón Regional de Artistas en Tunja.
A partir de entonces no ha dejado de producir pinturas, dibujos y grabados que exploran temas que van desde un costumbrismo que enfatiza los símbolos de nuestra costeñidad, pasando por la música y sus danzantes, hasta desembocar en una pintura cosmopolita que enfoca elementos asiáticos, incluso, argumentos abstractos de robusto colorido, sin olvidar las jubilosas imágenes del carnaval caribeño. También realizó, aunque sin ánimo ilustrativo, una serie de pinturas que recrean el realismo mágico el cual había estimulado su imaginación cuando leyó El otoño del patriarca, la celebrada novela de Gabriel García Márquez.
Por la época de sus primeros pasos en esta difícil disciplina, se interesó por el desnudo femenino pero más aún, se propuso investigar con espíritu crítico, la simbología raizal de la región Caribe. Es así que se observa en sus dibujos al carboncillo y diversas técnicas gráficas, el bohío campesino en su roza, los animales domésticos, el sombrero vueltiao, las abarcas típicas, pero también las columnas de humo que denuncian las quemas indiscriminadas, la calavera que asecha a los desprotegidos lugareños o el alambre de púas que encierra las grandes extensiones de tierra de gamonales y latifundistas.
Sin embargo, ha sido la música implícita en la danza en sus diferentes matices la que ha dominado un buen trayecto de su recorrido artístico. Las parejas que danzan al compás del mapalé o la cumbia bajo las estrellas y luna llena con velas encendidas, de acuerdo a la tradición folclórica caribeña, son recurrentes durante este período de las décadas del ochenta y noventa. Son figuras esquematizadas sobre trazos cromáticos en una coreografía que alude a la legendaria alegría y desparpajo característicos del ser costeño.
Ni siquiera en Beijing, mientras cursaba un posgrado en pintura tradicional china, olvidó su terruño ni sus aires musicales. En aquella remota ciudad experimentó una fusión asimilando el baile de la cumbiamba a la caligrafía china en parejas que se contorsionan de manera rítmica, pero al mismo tiempo simbolizan un ideograma del idioma vernáculo. Para demostrar su destreza en pintura china, también incursionó en paisajes orientales utilizando sus componentes tradicionales como tintas, acuarela, papel de arroz, caligrafía y sellos del artista. Sus años en China dejaron una profunda huella en su vocación artística. En Hong Kong, donde se radicó algunos años, desarrolló una pintura más afín con el cosmopolitismo que ostenta la ciudad asiática. Además de su conocida danza caligráfica, experimentó en una pintura expresionista de naturaleza abstracta con mayor énfasis en el color, manchas y círculos, como en un fluir de la conciencia, más intuitiva y espontánea que su obra hasta aquel momento.
Mientras estuvo radicado en Toronto (Canadá) exploró, en coloridas aguadas, la filosofía tántrica, la cual entiende la sexualidad como un proceso de trascendencia espiritual y que él representa como un recorrido energético o circuito cerrado entre ambos cuerpos durante la cópula. No se trata de una figuración realista, sino de encuentros amorosos sugeridos con manchas sensuales que evocan la intimidad del ser humano. Por la misma época, experimentó con la fragmentación, una suerte de puntillismo, que materializa las figuras con base en pequeños puntos cromáticos que vibran como fantasmagóricos espejismos sobre el lienzo. Más tarde, el espíritu lúdico de Edgar Francisko se manifiesta en paisajes oníricos con personajes camaleónicos que se esconden entre el follaje de un bosque idealizado.
Después de largos años de un exilio voluntario, se radicó en Bogotá para retomar el hilo donde lo había dejado, solo que ahora, ya con una pintura decantada y con absoluto dominio de sus técnicas, recupera la abstracción expresionista a la que vuelve en ciclos periódicos de creatividad visual. A raíz de una visita a República Dominicana descubre el vistoso colorido y el frenesí de las carnestolendas de La Vega. Entonces decide peregrinar al Carnaval de Barranquilla y se contagia con la alegría de su música y la espectacularidad de sus manifestaciones folclóricas. Enfila sus pinceles hacia el regocijo de la fiesta caribeña y, con el virtuosismo que caracteriza su trabajo, recrea las danzas y comparsas, en especial la Danza del Congo, del Caimán, de Farotas o del Garabato, con énfasis en su coreografía, sus desplazamientos cadenciosos y la vistosidad de sus exóticos disfraces".
2. Glen E. Cummings, Director del Museo de Arte Canadiense Contemporáneo, esto dijo sobre Edgar Francisco Jiménez López en Toronto, Canadá, en mayo del año 1999:
- "La pintura de Edgar Francisco tiende a reflejar el tema latino, no obstante son reconocibles las influencias de un entrenamiento europeo tanto en París como en Barcelona, así como la sensibilidad proveniente de los estudios en pintura china tradicional en Pekín y nueve años viviendo en el medio internacional de Hong Kong. Sus pinturas revelan una combinación de técnicas, a menudo conjuga un fondo líquido en los cuadros con temas elaborados de tal manera que dan la impresión de poderosos mosaicos.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario