lunes, 3 de junio de 2019

"BANDERAS"
Y SEÑALES DE VENTAS PUEBLERINAS.
Señal.
Venta bollo de yuca.

SEÑAL DE VENTAS CASERAS: Desde antaño la tradición en los pueblos del caribe, es colocar "banderas" en las casas y "borriquetes", en señal de venta de alimentos caseros, como bollos, carne, yuca, etc. También hay casas para identificar la venta de algo, colocan un galón. De modo que las “banderas” o “borriquetes”, son símbolos pueblerinos y la mañana es la hora predilecta para colgarlos en señal de venta, al  frente de la vivienda.  
Bandera.
Indica que hay un hueco.

BANDERAS ROJAS: Para las “banderas”, el color predilecto es el rojo de cualquier camisa, pantalón o traje que ya no es utilizado. Ese trapo rojo es una guía que significa venta de carne.
Banderas en señal de peligro: También en los pueblos y ciudades, colocan  "banderas", en señal de peligro, por lo general calles  con huecos, advirtiéndoles a peatones y conductores.
"Borriquete".
En la calle del pueblo.

"BORRIQUETES" O "BURRO": Los "borriquetes" o "burros", conocidos de igual manera como “borriquetes de tijeras”, consisten en un armazón de tres maderos en forma de trípode. Por lo general son utilizados para anunciar venta de bollos, arepas y yuca.
Clases de “borriquete”: Algunos añaden  encima de los "borriquetes", trapos,  cascarones y distintivos, según sea la venta así:
- Un “borriquete” con trapo rojo encima, significa venta de carne.
- Un “borriquete” con cascarón de maíz verde encima, significa venta de bollos de mazorcas.
- Un “borriquete” con cascarón de maíz seco encima, significa venta de bollo limpio. 
- Un "Borriquete" con un galón encima, significa venta de bollos de yuca.
CLASES DE BOLLOS: Las ventas de bollos preferidas son bollo de mazorca, bollo de yuca, bollo limpio, bollo de millo, bollo dulce, arepas y masas de maíz.
La señora Eusebia Domínguez, esposa de Gabriel “El Docto” Vizcaíno, murió vieja haciendo toda clases de bollos en Cantagallar, corregimiento de El Piñón Magdalena. La señora acostumbraba fumar tabaco, cuando  preparaba los bollos. Ese toque de humo tabaquero, le daba un mejor sabor, razón por la cual tenía una clientela apreciable en la región, a tal punto que hoy siglo XXI, su hija Argénida, es la mayor vendedora de bollos en Cantagallar.

VENTAS CALLEJERAS.
CON LA PONCHERA EN LA CABEZA: Anteriormente estas prodigiosas mujeres, no solo vendían pescados, bollos, yuca, mangos y dulces con la ponchera en la cabeza; también se iban para la ciénaga o el río a echar agua. Nunca se les cayó la ponchera, equilibrio absoluto.
Testimonio de María Arévalo Fontalvo, defensora de derechos humanos: Nuestras cabezas prodigiosas sin agarrarlas, equilibrio total, máxima seguridad, a mucho honor vendí desde niña en las calles de mi tierra natal Playón Orozco Magdalena y en Pivijay Magdalena;  en fin soy experta de cargar esa ponchera en mi cabeza con rodillo o sin rodillo. Desde las 5y30 AM, salía con mi hermano a vender: yuca, bollo de mazorca, bollo de yuca, bollo de limpio, bollo de millo.
- Después a la 1 PM, nuevamente a vender: cocadas, alegría, cucas o galletas keki, almojábana, panderos.
- También a las 5 PM, seguíamos vendiendo arenca, mojarra amarilla, yuca. Es por esto que en mi la humildad resalta a la vista, no me las doy más que nadie, ni critico su hablar o actuar, siempre que alguien quiera criticarme le sugiero colocarse en mis zapatos y que viva si quiera un poquito de lo que yo viví.
Poncheras de mangos en la cabeza: En el año 1970, había un  personaje en Santa Marta, que con una ponchera llena de mangos sobre su cabeza, recorría las calles de la ciudad gritando con tono afeminado:
- Llevo Mangos de Candela.
Este personaje dio lugar a que la agrupación musical Cantina y sus Muchachos, grabaran una guaracha titulada “Mango de Candela”, que en una de sus estrofas dice:
“Por aquí pasó Candela,
con su ritmo de fandango,
lleva un saco de mango,
pá los niños de la escuela”.
Las palenqueras: Son diestras en el manejo de la ponchera en sus cabezas, vendiendo alegrías con coco y anís, además de ricas frutas.  
Testimonio de una vendedora de dulces: En El Piñón, recuerda la profesora Bernavela Montero Rangel,  que la señora querida por todo el pueblo, la señora Juana Díaz, vendía alegrías y cocadas, bocadillos y otros dulces y cantaba el siguiente estribillo:
- "Hoy no fio, mañana si, hoy me paga el que me deba y al que yo le deba, que se espere".
VENDEDORAS EN BURROS: Anteriormente la mayoría mujeres, se desplazaban en burros con los cajones a un costado de los sillones de estos animales, pregonando ventas diversas como, bollos, panes, pescados, carne, etc.
Antaño honestidad a toda prueba: Las vendedoras de bollo limpio de Menchiquejo y de Tierra Firme, Departamento de Bolívar,  salían en sus burros de madrugada hasta la población de Mompox, allí en las ventanas de las casas coloniales, dejaban  los pedidos, regresando más tarde a recibir el pago. Nadie se cogía un bollo, era la época de las buenas costumbres.
Bollo en burro en Guamal Magdalena: Manifiesta Jorge Eliecer Ávila Martínez, que en Guamal, había un señor de nombre  Santiago Rivas, que cuando salía a vender bollo en burro, decía:
- “Bollo en burro”.
De modo que la gente le mamaba gallo preguntándole:
- Que vendes Chago, bollo en burro?
Ahora siglo XXI, en Guamal venden los bollos en bicicletas, porque ya no hay burros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario