CHUSCADAS EN CANTAGALLAR
EL PIÑÓN MAGDALENA.
EL PIÑÓN MAGDALENA.
Portada del libro
Chuscadas en Cantagallar.
INTRODUCCIÓN.
Las chuscadas
o las anécdotas hacen parte de las historias de los pueblos, cada población
tiene las suyas, y cada población tiene sus personajes chuscos. En Cantagallar, corregimiento del municipio El Piñón Magdalena, han sobresalido con sus chuscadas: José Santodomingo Rangel, Amarante Riqueth
Santodomingo, Juan Rada Pérez, Ignacio Rangel Mendoza, Leopoldo Varela Palmera,
Juancho Vizcaíno Sierra, Hermogenito Ospino Vizcaíno, entre otros.
Cabe destacar
que la mayoría son analfabetas, pero con una concepción práctica de la vida que
los hace más inteligentes que los que van a un centro de educación. Debido a
esa concepción práctica de la vida se daban el lujo hasta de inventarles
palabras al castellano como Uscurú, Levoya, Urra, Achuí, y lo más importante,
tenían una educación y un respeto envidiable, como que dejaron lecciones a las
nuevas generaciones en cuanto a solidaridad, unidad familiar, y honradez.
Esos
señores no conocieron la palabra violencia, esa que azota a nuestros pueblos
por estos días, en eso Cantagallar, ha sido privilegiado ayer y hoy, porque ha
contado siempre con un cuerpo de docentes que ha sabido orientar a las
juventudes. Si en la actualidad se encuentra uno que otro desadaptado que
genere violencia o desmanes, es más bien por influencias foráneas. La
influencia histórica de Cantagallar, si así se le puede llamar, es la de la
lengua viperina.
Si en algo se
caracteriza el cantagallero es por ser chusco, parrandero y mamagallista. Como
nunca han existido centros de recreación, la gente se las ingenia en los pisos
de las esquinas, en las parrandas, en los velorios, en el desmonte, en el
ordeño; a inventar cuentos, anécdotas, apodos, a mamar gallo. Estas
manifestaciones populares son las que engrandecen el diccionario cotidiano
pueblerino, y las que despejan de la mente los malos pensamientos.
Hasta los sitios de recreación han sido inventados por el común de la gente para poder aprovechar el tiempo libre. He venido desde tiempo atrás vendiendo la idea de un parador turístico y ecológico en el puente de Caño Ciego. Se aprovecharía mejor el cauce del caño, convirtiéndolo en balneario, se aprovecharía para conservar el ecosistema y reforestar el lugar. El puente de Caño Ciego es un punto estratégico que favorece a todo el municipio, con esta obra llegaría la recreación a cada uno de los habitantes de los diferentes poblados de la región.
Hasta los sitios de recreación han sido inventados por el común de la gente para poder aprovechar el tiempo libre. He venido desde tiempo atrás vendiendo la idea de un parador turístico y ecológico en el puente de Caño Ciego. Se aprovecharía mejor el cauce del caño, convirtiéndolo en balneario, se aprovecharía para conservar el ecosistema y reforestar el lugar. El puente de Caño Ciego es un punto estratégico que favorece a todo el municipio, con esta obra llegaría la recreación a cada uno de los habitantes de los diferentes poblados de la región.
Las chuscadas
en Cantagallar son de toda índole como los apodos, cambiarse el nombre. Entre
algunos de los apodos encontramos: Machacón, Catapila, Canto e’ Tierra, Sangre
e’ Yuca, Mondanguillo, Cucayo, El Tanque, Burrascú, La Pisinga, Rabo Pelao, La
Piragua, El Yumbo, El Cuerito, Boquilla, etc.
También ocurre que para
distinguir ciertos matrimonios, al hombre se le cambia el nombre por el de la
mujer y viceversa, por ejemplo: Juanita Nacho, Carmen Manuel, Lorenza Blacho,
Carmen Jichico, Juana Kiko, José Pachita, José Rita, Manuel Mamicho, José Pico,
Pedro Mari, Juana Aquile, Carlos Clara, etc.
En cuanto a los Porongo, se han
muerto muchos sin conocer a Dios, y según las estadísticas hay en estos
momentos sesenta y cinco hombres que ya les pitó el tren, y más de 29 mujeres
que están vistiendo santos, de acuerdo a la poesía de Carlos de la Hoz “El
Gringo”. Entre los porongos encontramos: Félix Blanco, Cesar Calvo, Will
Crespo, Machacón El Niño Ven, El Baco, El Colorao, Carlos Díaz, El Pillo,
Donaldo, Marguis Rojano, Nilson Nativa, etc.
Poco a poco
se ha ido acabando “el se salió”, ocurre que anteriormente los hombres y
mujeres aprovechaban las fiestas para “salirse”, más que todo en las fiestas
patronales de San Pedro, después del dieciocho de enero, la pregunta del
momento era:
- Quién se
salió anoche?
Hablando de
matrimonios el “cacho” siempre ha existido, lo que pasa es que las mujeres de
antes sabían quién era el padre de su hijo, cuando se aburría del hombre
buscaba otro y a ese otro también le paría, de modo que había mujeres que
tenían hasta cinco hijos de distintos padres. Ocurre lo contrario con las
mujeres actuales, porque hacen el amor simultáneamente en la misma época con el
uno y con el otro, que cuando paren, no saben de quién es el hijo.
La chispa
pintoresca de los cantagallero se encuentra hasta en los nombres de los
barrios, y lugares comunes como: El Bochinche, El Mondongo, Tanga Rota, La
Polilla, El Brujo. De igual manera el nombre de cosas como El Arroz subió, El
Jabón de Perro, El Salao, El Borriquete, Las Coletas, y su apodo perenne: Caga
Olla.
Gracias a
Joaquín Ospino Vizcaíno, apodado “El Docto”; y América Rangel Barrios, a quien
cariñosamente llamamos “Yaya”, fue posible este trabajo, por esa razón a ellos
se los dedico. Sin vanidades manifiesto que mis padres tienen una mente prodigiosa
y nada se les olvida.
Joaquín
Ospino Vizcaíno, fue Inspector del corregimiento de Cantagallar en diversas
ocasiones; y América Rangel Barrios, se adelantó a los programas de
alfabetización del gobierno, porque fue la primera que tuvo esta modalidad en
Cantagallar. Había que ver como en las horas de la noche llegaban a casa
personas interesadas en aprender a leer y escribir, sin cobrarles un centavo.
Por todas estas consideraciones es que la familia Ospino Rangel, aun cuando se
encuentra lejos del pueblo, nunca pero nunca, lo olvidará.
RAÚL OSPINO RANGEL, octubre del año 2003.
1. Juan Rada Pérez, era un hombre
muy jocoso. Una vez llegó Joselito “Cochón”, y le dijo:
- Compa Juan,
estuve en su “Roza” y note que la yuca suya se la están robando.
A lo que Juan Rada contestó acusándolo:
A lo que Juan Rada contestó acusándolo:
- Si, ya yo
sé. Ellos mismos son.
2. Nuevamente
llegó Joselito “Cochón” donde Juan Rada Pérez con lo siguiente:
- Compa Juan esta camisa mía, sí ha salido buena.
Juan Rada le contestó:
- Compa Juan esta camisa mía, sí ha salido buena.
Juan Rada le contestó:
- ¿Cuál?
“Cochón” le
ripostó:
- esta.
Sucede que la
camisa ya tenía diferentes colores de tantos remiendos de otras telas, a lo que
Juan Rada exclamó:
- Será el
cuello.
Antaño:
transportando una casa de un lugar para otro.
3. Llegó el “Pipio” Juvinao donde Juan Rada diciéndole lo siguiente:
- Compa Juan
ahora que venía de “Coco”, vi ahí en “Santa Clara” un portillo en la cerca y
los animales se le están saliendo. Juan Rada, le contestó:
- Bueno
“Pipio” habrá que esperar que vengan los hombres del monte, porque aquí en la
casa ahorita mismo lo que hay son mujeres: está la niña Delia; está la niña
Mary; está doña Fidela; está doña Juana y está Arquimeda.
4. Sucede que al presidente López Pumarejo, lo habían retenido unos militares en la ciudad de Pasto, lo que se constituyó casi en un golpe de estado. Al enterarse de esto por la radio, Ignacio Rangel Mendoza, manifestó:
- No han
debido haberlo puesto preso en Pasto, sino donde no haya nada que comé.
5. En la guerra de la violencia política asesinaron en Cantagallar a dos hombres, el uno de apellido Cuartas y al otro de apellido Lobo. Estos personajes como no tenían dolientes en la población, no tuvieron sagrada sepultura, sino que quedaron rodando por el suelo a merced de los cerdos. Durante dos semanas los cerdos se dieron gusto llevando pedazos de cráneo, de costilla, de brazos, de un lado para el otro. Este incidente contribuyó para que Digna “Tata” Vizcaíno, no comiera más nunca el puerco.
Trampa.
para cazar tierrelas y torcazas.
6. José Santodomingo Rangel, todas las tardes se iba para la casa de Máximo Ospino Pacheco a jugar dominó. Cuando metía una ficha fuerte para cogerle un pase al contrario y este no pasaba, ahí mismo ripostaba:
- Y tuvo el
canalla.
Cuando
lograba coger el pase se alegraba diciendo:
- Cayó el
Covino.
Si el
contendor se rebuscaba haciéndole jugadas inteligentes le manifestaba:
- Y este
animalito si es Cucuriaco.
7. Cuando Rafael “Mico” Mosquera se “sacó” a su mujer, ésta se quejaba en el cuarto. Raquel Ospino, su madre, oía los quejidos en el cuarto contiguo. Raquel aburrida de oír tantos quejidos explotó:
- Estás
prendía de mijo Rafa.
8. Sucede que Catalino Rodríguez, estaba de amores con Carmen Sofía, la hija de Máximo Ospino, el cual no estaba gustoso. Cuando Catalino, se ponía a beber cogía el micrófono del Pick-Up de Rosalía Muñoz y vociferaba:
- Esta
ranchera va dedicada a una bella mujer cuyo nombre me reservo.
Cuando máximo
Ospino Pacheco oía esto, las tripas del estómago se le torcían.
9. Entró en disgusto Leopoldo Varela Palmera con el profesor Demetrio Dedde. La razón: el profesor estaba molesto porque el agua de los quehaceres domésticos de la casa de Leopoldo, tenía como destino final la Escuela Rural de Varones. En vista de las quejas permanentes del profesor, Leopoldo Varela se molestó diciéndole:
- Oiga señor
profesor, sepa que usted es un advenedizo en este pueblo. Da repaso bajo
sombra.
Chuscadas de Rafael Pérez.
10. Invitó Leopoldo Varela Palmera, a la profesora Delia Calvo, almorzar en su casa. Sucede que por tradición la yuca sembrada en la finca “Santa María” salía rucha. Cuando le sirvieron en la mesa a Delia Calvo, la yuca resbalaba en el plato, y la profesora con su delicadeza empezó a comérsela como ratón, es decir, por encimita. Leopoldo Varela, al ver la actitud de Delia, manifestó:
- Doña Delia,
no la rúa, trócela por derecho.
11. En una ocasión Leopoldo Varela Palmera, afirmó que en el cielo había millones de velas encendidas, y que cada vela correspondía a un ser humano en la tierra. Cuando una de esas velas se apagaba, de inmediato moría la persona correspondiente en la tierra.
12. Cuando el viejo Eligio Monzón se “sacó” a Toña Calvo, alguien le preguntó:
- Ajo Eligio,
y te casaste.
A lo que él
respondió:
- Que vá, pa’
pasá el tiempo.
Quiso dar a
entender que lo de Toña era un vacilón. Sucede que el vacilón duró toda la
vida.
13. Tenía Joaquín Vizcaíno, la mala costumbre de salir madrugado para el monte y quedarse en la esquina de Emilia Santodomingo Ospino, bebiendo con Israel Ospino Vizcaíno, Eusebito Vizcaíno y Daniel Juvinao. Cuando Petronita Rodríguez, su mujer, se levantaba a comprar el bollo, ahí lo encontraba gozando de la buena vida. De modo que ella aburrida le reclamaba delante de sus amigos su mala actitud. De inmediato él respondía sin razón:
- Ya sé, eso
es lo que tú quieres, que yo me vaya pa’ el monte pa’ tu quedarte en el pueblo
con tus sinvergüenzuritas.
14. Había una
discusión sobre la llegada del hombre a la luna, y sobre los giros de la
tierra, en la discusión intervino “El Palle” Crespo diciendo:
- Que va usté
a pararle bola a esos periodistas. Primero que todo esos gringos no han ido a
ninguna parte, y segundo si la tierra es verdad que gira, por qué la casa mía
no amanece al revés.
15. Delia Calvo,
le dijo a Foción Santodomingo Ospino:
- Ay Foción,
porque te casaste tan joven.
A lo que él
respondió:
- Por que el
cuerpo me pedía mujé.
16. Llegó José
Hilario González borracho a su casa, y lo que encontró servido en la mesa fue
un plato de mazamorra. Enseguida ripostó:
- Mira
Filomena cuando el compa “Irra”, está bebiendo, “Niñita” Pallares, le prepara un
“caldito”; y mira tú lo que me das, un plato de mazamorra, y de ahuyama.
17. Una de las
características de la familia Ospino, es el casamiento de primos con primas.
Sobre el particular Hermogenes Ospino Vizcaíno se burló, debido a que los
Ospino son pobres:
- Eso es pá
que la plata no se salga.
18. Sucede que
José Juvinao debido a la familiaridad con Hermogenes Ospino Vizcaíno siempre
vive poniéndole pereque, pero hay veces que le saca la piedra. En uno de esos
juegos de dominó de todas las tardes, Hermogenes se le emputó echándolo de la
casa. A lo que José le respondió sarcásticamente:
- Es que yo
no estoy en esta casa en la parte tuya, sino en la parte del primo “Docto”.
19. Enamoró
Hermogenes Ospino Vizcaíno a Manuelita Guillé, a lo que ésta le respondió
enojada:
- Oooo,
cásame yo con este viejo.
De inmediato
Hermogenes, le ripostó enojado:
- Oooo,
Cásame yo con está laura.
20. Carlos Julio
Ospino Noriega se enfermó, a lo que Marcos Riqueth Ospino le dijo a alguien,
que eso se debía al hambre vieja que había pasado. A Hermogenes Ospino no le
gustó la expresión sobre su hijo, de manera que un día bebiendo le reclamó:
- Oye, estás
muy orgulloso con las cuatro vacas viejas que tienes. Es cierto que mi hijo ha
pasado hambre, pero lo que sí te digo es que tú no entras donde entra él. Es
más, si a ti te llevan a la Gobernación del Magdalena, te cagas en el pasillo,
porque no sabes dónde queda el baño. Indecoroso, indigno, aborto de la
naturaleza.
21. Enrique
Riqueth Ospino, dentro de sus curiosidades, un día preguntó:
¿Bueno, y los
ricos cagan?
De inmediato
Marcos Riqueth Ospino, le contestó:
- Y más
hediondo que los pobres.
22. Duró una
época Félix Palmera Vizcaíno encadenado en casa de su padrastro Pedrito Varela,
que entre otras cosas le tenía un pánico profundo. Cuando se muere Dilia
Vizcaíno Sierra madre de Félix, y mujer de Pedrito, en pleno velorio se
escuchaba el sonido de una cadena de un hombre corriendo, y se escuchaba la voz
de otro gritando:
- Se soltó
Félix, se soltó Félix.
El
nerviosismo cundió en el velorio y Pedrito Varela no hallaba donde pararse
diciendo:
- Amárrenlo,
amárrenlo, amárrenlo.
No era otra
cosa que Luis Alberto De La Hoz, y Hermogenes Riqueth Ospino, quienes habían
propiciado este drama.
23. No sé si
será de él, pero siempre escuché a Roberto Ospino Vizcaíno, recitando estos
versos:
Padilla
compró un libro
para aprender
a leer
ni Padilla
entiende al libro
ni el libro
lo entiende a e’.
24. Juan Rada
Pérez, creó estos versos consejeros:
El que de
mujer confía
muy poca
experiencia tiene
porque la
mujer lo vende
lo presta, lo
da, y lo fía.
25. Había tres
hermanos en Cantagallar cuyos nombres no recuerdo, eran unos parranderos
empedernidos. Por iniciativa de ellos mismos decidieron irse para el monte para
no beber más Ron Caña, que para la época costaba sesenta y cinco pesos.
Prometieron y juramentaron no mencionar más la palabra Ron, entonces los
juramentos eran serios. De modo que a los dos meses de estar en el monte, uno
de los hermanos dijo:
- Ay de
aquel.
A lo que
respondió el otro hermano:
- Pensando
estaba en él.
El otro
hermano no aguantó la tentación:
-Coge los
sesenta y cinco, y ves por él.
26. Resulta que
la familia Riqueth por tradición han sido matarifes, de igual modo la familia
Pallares por tradición les ha gustado el manejo de las bestias. De modo que hay
un dicho ya célebre en la región:
- Pa’ los
Pallares el caballo, y pá los Riqueth el puerco.
27. Resulta que
llegó Rafael Pérez a Cantagallar, y se casó con Ledis la hija del De La Cruz.
“Joche” Rada de política conservadora, quiso desde un comienzo cautivar este
voto, pero le daba pena pedírselo. De manera que en una de las tantas idas a
“La Playa” en donde frecuentaban ir juntos madrugados, “Joche”, le preguntó:
- Dígame una
cosa: ¿Usté es liberá ó conservador?
Rafael Pérez
entendió el mensaje y no lo pensó dos veces:
- Pues sí
“Joche”, yo soy liberá.
28. En el
corregimiento de Coco Solo, un compadre le debía una plata a Blacho De La Rosa.
Todos los días salía Blacho del corregimiento de Vázquez a cobrarle, pero
cuando llegaba a la casa del compadre lo atendía tan bien, y con desayuno a
bordo, que a Blacho le daba pena cobrarle. De modo que un día Blacho salió
dispuesto, cuando llegó dando los buenos días el compadre manifestó:
- Mija, llegó
el compa Blacho sírvele desayuno.
A lo que
Blacho contesto dispuesto:
- Bueno compa
ya yo estoy desayunao, yo hoy vine fue por mi “cocá.”
29. Tenía Marcos
González Romo, una vaca parida llamada “Agua e mai”. Era obediente y con sólo
decirle “Agua e mai” ella hacia caso y se dejaba ordeñar. Resulta que cuando
vino Oswaldo González, de Barranquilla, donde estaba estudiando, quiso refinar
el nombre llamándola:
- Agua de
maíz, agua de maíz.
Con este
llamado la vaca no paraba bolas.
30. Amarante
Riqueth Santodomingo, e Ignacio Rangel Mendoza, eran dos buenos amigos del
licor. Sucede que andaban por los lados del corregimiento de Moya y estaban sin
un centavo para seguir bebiendo, de inmediato se acordaron que ahí vivía
Agustín Potes, padre de Andrea Potes, y ésta nuera de Ignacio Rangel. Llegaron
tocando:
- Agustín,
Agustín; hay novedá, hay novedá.
De inmediato
el señor se levantó y quedó mirando una luna llena que había en el momento, a
lo que Amarante le enfatizó:
- No mire la
luna, que lo que venimos es por plata, porque Andrea Potes, se está muriendo.
De esta forma
engañaron al pobre señor.
31. Amarante
Riqueth Santodomingo e Ignacio Rangel Mendoza, se perdían por la montaña con el
pretexto de ir a negociar, cuando realmente lo que salían era a parrandear.
Josefita Barros, mujer de Ignacio, ya los conocía, de manera que a las dos
semanas que regresaban al pueblo, y ella los veía llegar, gritaba diciéndole a
Francia de la Hoz mujer de Amarante:
- Abra el
portón, coma, que ahí viene la gente con el viaje de ganao.
32. Tenía “La
Niña” De La Rosa, una venta de ron y uno de sus clientes y buena paga era “El
Ñato” González. Una noche estaba Carlos Varela, bebiendo y sin plata, de modo
que llegó donde “La Niña” De La Rosa, y pidió tres botellas de ron ñateando
como González. “La Niña” De la Rosa comió del cuento y ya le iba a entregar el
ron, menos mal que en frente estaba oyendo todo el rollo el padre de Carlos,
José Manuel Varela que enseguida advirtió a la tendera:
- Mentira “Niña”
De La Rosa, ese no es el ñato, ese es el sinvergüenza del hijo mío.
33. Cuando
Manuel De La Hoz, era alcalde de El Piñón, construyó un balcón en la Alcaldía
Municipal. Rafael Parada, que estaba dolido porque Manuel lo había derrotado,
sobre la edificación de este balcón dijo:
- Desde allá
me los voy a mea a toditos.
Lo bueno del
caso es que la promesa no la ha podido cumplir.
34. Cuando
Carlos Carbonell Álvarez era alcalde de El Piñón, llegó Cristóbal Llinás a la
Alcaldía buscando no sé qué. Cristóbal había sido enemigo político de
Carbonell, es más manifestó en plena campaña que si Carlos ganaba la alcaldía,
le mandaba a hacer una estatua en la plaza principal. De modo que cuando Tulio
Riqueth Ospino, concejal del grupo Carbonell lo ve entrar a la Alcaldía, le
manifiesta:
- Me haces el
favor y desguindas “los cantos”, porque ya la hamaquita se te acabó.
35. Estaba
Hermogenes Ospino Vizcaíno, con un grupo de jornaleros ganándose el día.
“Olaya” Vizcaíno, sabía del inconformismo de Hermogenes, con la vida por culpa
de la pobreza. Pero también sabía “Olaya”, que Hermogenes, no había aprovechado
los estudios, cosa que sí hizo su hermano Raúl que se graduó de agrónomo, y
ahora estaba bien posicionado con un cargo importante en la ciudad de
Sincelejo. A pleno medio día y con chorros de sudor en todo el cuerpo, “Olaya”
afirmó:
- Me imagino
compa Hermogenes, cómo debe estar el Doctor Ospino ahora mismo sentado en una
butaca tomando agua fría, y nosotros aquí sudao y sin terminar la tarea.
Hermogenes Ospino, explotó:
- Hombre
desgraciao, cómo vienes a dañarme el día recordándome esa cosa.
36. Ascanio
Riqueth, era un amigo incondicional de Hermogenes Ospino, y siempre se lo
llevaba para el corregimiento de Sabana, más con el ánimo de hacer maldades que
de trabajar. Un día en horas del desayuno Ascanio le dijo:
- Compa Hermogenito, tome café.
Cuando
Hermogenes coge la olla observa que está llena de sarapicos, y de inmediato le
pregunta que de dónde cogió esa agua, dándole Ascanio esta respuesta:
- De ahí
compa Hermogenito, de la charquita esa. Ajá y eso qué es.
37. Pedro “El
Turco” Alí fue muy amigo de Cantagallar, porque contaba en este pueblo con
buenos amigos bebedores como Israel Ospino Vizcaíno, Eusebito Vizcaíno, Joaquín
Vizcaíno, entre otros. Eran parrandas largas pero todas desde la cuatro de la
mañana hasta las seis de la tarde, máximo. Fue Pedro “El Turco”, el que hizo
célebre esta frase:
- Ahora sí
estoy lindo, compa “Irra”, con ganas de seguir, y con ganas de aflojar.
38. Uno de los
artes de Eusebito Vizcaíno y de Israel Ospino era empajar casas, pero siempre
ese trabajito terminaba en borracheras. Amarante Riqueth Santodomingo que
siempre le gustó el licor pero que no trabajaba, andaba pendiente y detrás de
ellos. En una ocasión los buscó Foción Santodomingo ospino, para que le
empajaran su casa. Empezaron como de costumbre a las cinco de la mañana a
empajar, pero ese día Eusebito estaba aburrido de tantas gorreadas de Amarante.
Al llegar las diez de la mañana y en vista de que no se había tomado un trago
de ron Amarante preguntó:
- Ajá, y no
vamos a bautizar a ésta.
De inmediato
respondió Eusebito:
- No señor,
ésta quedará mora.
39. Cuando
inventaron el tarjetón electoral salió como de costumbre a votar en las
selecciones Manuelito Acuña por el político amigo de “Joche” Rada. Manuelito
estaba acostumbrado a las papeletas, más no al tarjetón. De modo que cuando
salió de la urna manifestó:
- Bueno
“Joche”, yo estaba buscando tu cara para rayártela, pero no la encontré; Así
que marqué a uno parecido a ti.
40. Venía una
comisión gubernamental para Cantagallar, en el puente de Caño Ciego se
encontraron con Manuelito Acuña y le preguntaron que quién era el inspector, a
lo que Manuelito respondió:
- Carajo,
aquí ponen a cualquier mondá.
41. Tenía Ovidio
De La Rosa y Pepa De La Cruz un loro, pero un loro hablador. Ovidio, estaba
molesto con el loro, porque éste con el pico le mochaba los bejucos de la casa.
De modo que un día se aburrió y le dijo a Pepa su mujer que lo vendiera en
Calamar. Salió Pepa para Calamar, y al llegar al puerto unos turcos se
enamoraron del loro, al preguntarle que si lo vendía Pepa respondió
afirmativamente. Pero los turcos pusieron como condición que lo hiciera hablar,
de modo que empezó Pepa a hacerle morisqueta al loro, y éste dónde hablaba, en
vista de tal situación los turcos no lo compraron. Ya de regreso en la chalupa
el loro se movió.
- Carajo
Pepa, si me hago el pendejo me vendes.
42. Había en el
corregimiento de Mico, un hombre apodado “Cruzito”. Se caracterizaba este
hombre por su mal presentación personal. Cualquier día llegan a decirle a Juan
Rada Pérez, que “Cruzito, se había casado, a lo cual respondió en tono burlón:
- Ya me
imagino con quien, con una mujer bajita, negra de color, pelo cucú, patas chorriá,
sucia y mal trajiá.
43. Había una
controversia entre Juan Rada Pérez y Leopoldo Varela Palmera. Este último
manifestaba que no conocía la necesidad, a lo que Juan Rada, apuntó: - Yo sí la
conozco, es una mujer alta, de color blanca, porfiá, anda detrás de las puertas
con una ollita en la mano, y de mal corazón.
Lo curioso
del caso, ya casado Leopoldo llegó donde Juan, y le dijo:
- Ahora sí la
conozco, igualita como usted me la pintó y es de malos procedimientos.
44. Estaba
peleando Guillermo Polo Gómez, con su mujer la hija de Eduardo Sarmiento. En
eso Guillermo se sentó en un taburete cuyo fondo estaba roto, y no solamente
eso, sino que también tenía roto el pantalón y sin pantaloncillos. Enfrente de
él estaba también sentada su mujer, que veía cómo el gato arañaba los huevos de
su marido, ofuscada se fue en contra del animal:
- Jucce,
gato.
Guillermo le
respondió:
- Ajá, y tú
no y que estás brava con migo.
Ella replicó:
- Sí, estoy
brava contigo, pero con los huevos no.
45. Como sabía
que las parrandas eran para amanecer, cuando “El Palle” Crespo, escuchaba la
música del Pick-Up de Rosalía Muñoz, sentenciaba: - Mañana hay leche quedá.
46. En una
parranda Humberto Ospino Gómez hijo de Roberto Ospino Vizcaíno con Célmira
Gómez; Humberto manifestó en su tono gago que él se llamaba Humberto y Gómez.
Álvaro Ospino Rangel, que le estaba parando bolas al asunto le replicó:
- Quítate la
medio maricaita buena que tienes.
47. Humberto
Ospino Gómez ha sido siempre compositor, tiene un cuaderno de más de 50
canciones, pero no ha tenido la fortuna que le graben una. Llegó Toño Noriega
Calvo y le preguntó:
- Quibo
Humberto, dame razón de tus canciones.
El manco
Humberto, le respondió:
- Ahí están
que se quieren, que podrí.
48. Decía José
Santodomingo Rangel en plaza pública, vestido de rojo:
- El Partido
Liberal es un león dormido, Júzguenlo pa’ que vean.
49. Una vez
salió José Santodomingo Rangel en su caballo a recorrer las calles del pueblo,
en eso exclamó:
- Pueblo,
¿tienen hambre?.
La multitud
en coro respondió:
- Sí.
Él alzando la
bandera roja remató:
- Coman
mierda.
50. Llegó Rosita
la hija de Celín, con Lola, asustada a la casa de América Rangel:
- Niña América cuando Celín, se va en la madrugada a pescá yo siento en el cuarto un “chau, chau, chau”, como puerca comiendo afrecho.
- Niña América cuando Celín, se va en la madrugada a pescá yo siento en el cuarto un “chau, chau, chau”, como puerca comiendo afrecho.
51. Se
acostumbraba anteriormente hacer varias “Rosas” en un mismo potrero. Hermo el
de Dioselina Ospino, por andar buscando patillas se perdió en uno de esos
sembrados. Hermogenito Ospino su tío, en vista de la ausencia comenzó a gritar:
- Hermo,
Hermo, Hermo, donde estás tú.
De inmediato
Hermo contestó:
- Estoy aquí
en la “Roza” de un hombre que se escribe con A, y se llama tío “Irra”.
52. Tenía
Hermogenito Ospino Vizcaíno una yegua a la que llamaba “Cachara”. Como
Hermogenito le tocaba viajar a Santa Marta, le pidió el favor a Foción
Santodomingo Ospino para que se le dejara por unos días en la huerta “El
Bochinche”. Ascanio Riqueth De La Hoz, con el ánimo de que su amigo querido no
demorara tanto en el viaje, puso el siguiente mensaje social en Radio Libertad
de Barranquilla:
- Se le avisa
a Hermogenito Ospino, que la “Cacha” murió en “El Boche”.
53. Salió
Juancho Vizcaíno Sierra con cinco burros a la finca “La Mina” a buscar un maíz,
llegando a su destino se devolvió a casa. Isabel Pertúz su mujer, al verlo
embolatado le preguntó qué le pasaba y él le respondió atolondrado:
- Es que se
me ha perdido un burro.
Entonces ella
lo interrogó:
- ¿Y tú
cuántos llevaste?
Él le
respondió:
- Cinco.
Ella en su
sano juicio le explicó:
- Ajá, cuatro
que llevas por delante, y uno donde vas montado ¿Cuánto es? Entonces Juancho
recapacitó:
- Maldita
sea, era que yo no contaba el de la montura.
54. Un suceso
similar al anterior le pasó a Hermogenito Ospino Vizcaíno. Sucede que le tocaba
tumbar un monte en el potrero “El Salao” más allá de Tiogollo; cuando iba
llegando a Vázquez se dio cuenta que había olvidado la rula, y de inmediato se
devolvió. Eloísa Noriega su mujer, al verlo enloquecido y picado de culebra le
preguntó qué le pasaba y él respondió:
- No ves que
se me ha extraviado la rula.
Ella lo miró
fijamente y le mostró con el índice la cubierta que llevaba en el hombro,
enseguida entró en cólera:
- Yo soy el
hombre que no sirvo debiera venir Eusebio Rangel De La Hoz, y “enterrármela”
todita pa’ que no sea marica.
55. Tenía Juan
Jiménez, Israel Ospino y Joaquín Vizcaíno, un desmonte grande en el
corregimiento de Tiogollo, y todos los días se iban madrugado en sus burritos a
trabajar. El único que iba a pie era Manuel Jiménez, esto causaba dolor a
Israel y a Joaquín, de modo que a la semana le buscaron un burro. Lo curioso
del caso era que Manuel Jiménez salía del pueblo montado en el burro, pero más
adelante echaba el burro por delante y él a pie gritando alegre:
- ¡Upa burro,
upa, upa!
56. Tenía
Fidelito Barrios, unas ganas inmensas de tomar ron pero estaba sin un centavo,
como no había quien le prestará ni quien le fiara una botella de ron vendió la
hamaca, pero la venta la hizo justificando con defectos:
- La verdad
es que dormí en hamaca es incómodo, uno está es torció’, mejó es dormí en el
suelo.
57. Se encontró
Denis Osiris a su padre Goyito Hurina, dándole las nalgas a Juan Cantillo, ella
se decepcionó:
- Ay papa, yo
no creía eso de usté.
Goyito
Hurina, le replicó:
- Y tú que
vas a hablá, yo no digo na’ cuando “El Popo” te tiene ensatá.
58. Sucede que
Hermogenito Ospino Vizcaíno nunca se ha ganado ninguna clase de rifa, lotería o
chance. De modo que un buen día le apuntó a Carmen Emilia el chance y ganó,
pero lo triste del caso fue que Carmen Emilia ese día no tenía para el arroz de
la tarde y no entregó el talonario ganador. Hermogenes al día siguiente renegó:
- Maldita sea
hasta mi vida, debiera de vení una centella y matarme en mil pedazos. Yo sí soy
el tipo salao’, pero rifen un Tifo, una Tuberculosis, un Sida, pa’ que vean que
sí gano.
59. Se
encontraba Agustín Rada Díaz estudiando su carrera profesional en Bucaramanga,
de modo que siempre que necesitaba plata le escribía a su padre Juan Rada Pérez
solicitándole recursos. Como Juan Rada sabía de antemano el contenido de las
cartas no las leía ni las abría, de manera que Fidela Díaz su mujer, le
recordaba que Agustín le había escrito, y que las leyera. A lo que Juan Rada le
respondía:
- Déjalas ahí
Fidela, que ya yo las leí.
60. Había un
baile en Cantagallar y estaba “El Cuco” De La Rosa, bailando con una buena
pareja. Como iba tan apretao el roce constante motivó que al “Cuco” se le
encañonara la animaleja, y por consiguiente la mujer inocente sintiera los
candelazos:
- Ay “Cuco”,
yo siento ahí una cosa que me roza. ¿Eso qué es?
- Ay mija, no te preocupes que esa es la
pacporúa.
61. Decía Abel
González Romo:
- Pa’ el
Ganao el Mono Zambrano, pa’ El Mulo Pepito Zambrano, y pa’ el Puerco yo.
62. No se
gustaban políticamente Toño Villa Carbonell con Enrique Caballero Lafaurie, lo
que originaba controversias y debates públicos en el corregimiento de
Cantagallar. Sucede que Enrique Caballero, cuando estaba en la tribuna hablaba
con los brazos arriba (como pidiendo misericordia) y estos eran detalles que
aprovechaba Toño Villa para burlarse:
- Amigos
Cantagallero, me contaron que la semana pasada estuvo por aquí buscando votos
el orador misericordioso.
63. Iba pasando
en su caballo por el puente del Cerro de San Antonio Amarante Riqueth
Santodomingo, Tiburcio Riqueth su primo al verlo vociferó:
- Ahí va el
borrachón de los Riqueles.
De inmediato
Amarante replicó:
- Y tú el
macriao de los Riqueles.
64. Dijo Álvaro
Ospino Rangel refiriéndose a Rafael “El Mico” Mosquera, y para molestar a
Hermogenito Ospino Vizcaíno:
- Primo Rafa
usté cuando joven debió ser simpático porque la cara de usted es la mismita de
la de papá Hermógenes.
Hermogenito
Ospino de inmediato replicó:
-Nojoda tu
tendrás los ojos en el jopo, qué se va a parecer esa porquería a mi papá.
65. Corrió el
cuento que en el lanzamiento de “bolas” para el cuartel, había quedado
Hermogenito Ospino. Ana Joaquina Ospino Pacheco, al enterarse cayó en crisis
nerviosa, y en ese estado la encontró Anuario Salina Pacheco. Anuario al verla
así le preguntó qué le pasaba, ella le respondió:
-Ay Anuario,
es que se llevan a Hermogenito para el cuartel.
Anuario, en
tono burlesco la tranquilizó:
- Que va Ana
Joaquina, que se van a llevá a ese ñeque.
66. Dionisio
Ospino De La Rosa vivía en una polémica con Teófilo Palmera. Dionisio le decía
a Teófilo, “Ofilo” y Teófilo le decía a Dionisio “Nisio”. La razón: Teófilo
decía que Dionisio no era Dios, y Dionisio decía que Teófilo no era tío de él.
67. Carlos Julio
Ospino Noriega le prometió una mechera a Rosalía Palmera, pero siempre que
venía de Santa Marta le decía yo se la voy a regalar, razón por la cual
Rosalía, le sacó el siguiente verso:
Carlitos, si tú
supieras
que ofrecerle
no repolla
me quitaste
el Palmera
y me pusiste
“El Levo ya”.
68. Teófilo
Palmera y Manuelita Vizcaíno en el municipio de Plato, se convirtieron a la
religión evangélica. Sucede que Manuelito Vizcaíno hermano de padre y madre de
Manuelita, fue a visitarlos y por consiguiente ella empezó a presentarles a sus
amigos:
- Manuelito te
presentó a la “hermana” tal; Manuelito te presento al “hermano” fulano, en fin.
Al terminar
tanta presentadera dijo Manuelito, refiriéndose a su padre:
- Carajo
Manuelita y Eusebito por aquí como que dio buen clavito.
69. Se
encontraba el “Negro” Caballero herrando unos animales en su finca “Pacheco”.
Manuelito “Chencho” en ese mismo instante estaba descamisado pisoteando un
queso. El “Negro” Caballero al verlo en esa postura le encimó el hierro
caliente en la espalda, quedando marcado para toda su vida.
70. Se
encontraba bebiendo ron Juancho el hijo de Juan Díaz, de manera que iba por la
calle borracho y gritando:
- Yo soy el
hierro, yo soy el hierro.
Así con ese
grito llegó a su casa, Juan Díaz su padre al oírlo manifestó:
- Que va
hombre, tú lo que eres es tártara vieja, el hierro es Jose.
71. Tenía
compromiso político Arístides Juvinao con Jorge Caballero, de ponerle los votos
de Cantagallar a un amigo de Jorge que aspiraba a la Asamblea Departamental.
Arístides como siempre, negoció los votos con otro candidato y a ese sí le
cumplió. Jorge Caballero para la época era Gobernador del Magdalena, y de
manera fulminante le botó las hijas que tenía empleadas en Santa Marta, y no lo
dejó entrar a la Gobernación. Pero Arístides, como buen zorro político un día
se le presentó al despacho:
- Bueno Jorge
vengo a pedirte disculpas, de ahora en adelante si tú me pones a votar por un
zapato por un zapato votaré; si tú me pones a votar por un puerco por un puerco
votaré.
La verdad que
le funcionó la receta, porque de ahí en adelante se convirtió en uno de sus
mejores amigos.
72. Se lanzó el
“Cachaco” González al Concejo Municipal de El Piñón, de modo que una noche fue
donde su tío Juan Díaz a buscar votos, diciéndole:
- Tío, vengo
aquí pa´que me acompañe.
A lo cual
respondió Juan Díaz:
- “Cacha”, y
tu cuando has necesitao compañía.
73. Estaba
Pablito Polo en la finca “Guayabal” cortando leña, de repente se espantó un
conejo. Pablito se alegró porque ahí tenía el guiso de la tarde, y se le pegó
corriendo tras de él. Pero no fue fácil porque el conejo astuto se metió en una
palizá de tunas, Pablito decepcionado lo chifló:
- Uju, uju,
uju, él creía que era verdá.
74. Se
encontraba “Chito” Gámez parrandeando y mujereando. Petronita Barros su mujer,
celosa y brava lo esperó a que llegara. No lo dejó entrar a la casa, sino que
en plena calle lo cogió de los brazos y lo tiró al suelo. Enseguida se alzó la
pollera y le restregó la chucha varias veces por la cara, diciéndole:
- Acaso es
que está no te sirve, pendejo.
75. Siempre el
“Pillo” Crespo ha estado en política opuesta a Jorge Caballero. Una vez en una
manifestación pública el “Pillo” dijo, refiriéndose a Jorge:
- Pueblo,
ayer estuvo por ahí el vampiro mono de ojos azules, que ha desangrado las arcas
del Departamento.
76. Apoyó
Arístides Juvinao la candidatura de Roberto “Capi” Páez a la Alcaldía
Municipal, pero en esa ocasión el “Capi” perdió con Rafael Parada. Arístides
que siempre ha sido gobiernista, se volteó luego para donde Parada lo que
disgustó al “Capi”. Cuando Arístides se enteró de que su amigo “El Capi” andaba
bravo, manifestó:
- Yo acompaño
al muerto hasta el cementerio, pero no me entierro con él en el hueco.
77. José María
“Chema” Varela siempre ha sido liberal, pero cuando se lanzó Antonio Navarro
Woolf a la presidencia de la República voto por él, a solicitud de Humbertico
“El Chorro” Rada que era el coordinador de la campaña. El “Pillo” Crespo de
política liberal, que sabía que “Chema” andaba buscando un nombramiento de
profesor, comentó refiriéndose a “Chema”:
- Bueno Ahora
que chorré.
78. Trabajaba
Raúl Ospino Rangel en la Alcaldía de Plato nombrado por Julio Ramón Peñaloza,
sucede que se dieron dos cosas: la primera, que el concejal que apoyaba
políticamente Raúl, se había distanciado del alcalde Peñaloza; la segunda, que
Jorge Caballero era candidato a la Gobernación del Magdalena. Jorge Caballero
hizo alianza con los Pomarico contrarios de Peñaloza, y Raúl Ospino le había hecho
una canción política a Pomarico, que la cantó en una gran manifestación con la
presencia de los candidatos. Al enterarse Peñaloza de esta circunstancia opinó:
- La verdad
es que el muchacho canta y compone muy bien, pero mañana lo boto de la alcaldía.
79. Se
trasladaron la familia Ospino Rangel y la familia Palmera Vizcaíno al
corregimiento El Pueblito Los Andes. Salió un camioncito con todos los
chécheres de los dos hogares una madrugada de 1974. El chofer del camión pensó
que el sitio era cercano, pero a medida que pasaba el tiempo se dio cuenta que
el camino en mal estado era lejano. Sólo entre oscuro y claro lograron llegar
al casco urbano del corregimiento, pero el punto de llegada era una montaña más
allá, el chofer ya ofuscado se plantó:
- Yo de aquí
no paso más.
No valieron
las súplicas de Manuelita Vizcaíno y de América Rangel, porque el chofer las
remató con esta sentencia:
- Oigan
señoras, esos maridos de ustedes no las quieren, miren donde las han traído,
esto es el fin del mundo.
Dos mujeres
que estaban nostálgicas por el abandono de su terruño natal y con semejantes
expresiones, el llanto no se hizo esperar.
80. Antonio
Crespo se ha ganado un apodo muy bien merecido, porque cuando está en la calle
borracho grita:
-“La Picha”,
está en la calle.
81. Sucede que a
Marcos Riqueth Ospino le estaban robando las gallinas, y por ende decidió
comprar un revolver porque lo que tenía era una perrita a los cuales los
rateros no le tenían miedo. Ya con el revolver debajo la almohada dijo:
- Pueda ser
que esta noche lleguen, porque alguno mato.
Efectivamente,
esa noche comenzaron las gallinas a brincar y cantar, prueba de que se las
estaban robando. Marcos Riqueth que toda la vida fue nervioso, no le daban las
manos para agarrar el revólver, lo único que se le vino a la cabeza fue lo
siguiente:
- Jue perra,
jue, jue, jue perra.
Camas de Tijera:
Los colchones de antes.
82. Debido a su
marcado “Paradismo” político, Hermogenito Ospino Vizcaíno, afirmó en una
parranda que él se llamaba Hermogenes Parada. La reacción de Israel Ospino su
hermano, fue una buena bofetada en el mentón, reprochándole:
- Pá que
respetes, “Tata” nunca fue puta.
83. Se
encontraba Roberto Ospino Vizcaíno en una esquina, al momento pasó una bella
joven y él la piropeó. La muchacha le contestó:
- No se ve
tan viejo, ese disco está rayao.
Roberto
Ospino arremetió:
- Todavía
Juancho Polo, graba.
84. Asunción
Orozco “Mamá Chon”, era una mujer parrandera y bruja. Estaba en la fiesta del
corregimiento de Coco Sólo y en la madrugada regresó a Cantagallar, cuando ya
iba llegando al pueblo se encontró con un cajón con velas encendidas en mitad
del camino, ella de inmediato se le sentó para terminarse de beber la botella
de ron. La otra bruja que estaba dentro del cajón, en vista de que ya era casi
de día y Asunción no la dejaba ir, se le presentó con nombre propio y le
suplicó que la dejara tranquila. “Mamá Chon” accedió al pedido y se fue a
dormir borracha a la troja que tenía en el patio de su casa, la otra bruja
aprovechó el estado de embriaguez de su contendora y en un acto cobarde y de
venganza le haló el dedo grueso del pie izquierdo y la dejó muerta
instantáneamente.
85. Un juego muy
popular de épocas pasadas:
- La tripa,
la cagalá
tú que la
tienes
dámela acá.
86. Tenía Ramona
de la Rosa una burra, dicho animal no tuvo tiempo de tirarse en el suelo para
morir, sino que quedó muerta recostada y parada sobre la cerca de su casa.
Debido a este accidente, ha quedado para la historia este dicho popular:
- Vas a morir
como la burra de Ramona.
87. Sucede que
Goyito Hurina hizo el amor con Rosa Mejía en el sitio llamado “El Mondongo”, en
el acto Rosa Mejía se poposió. Dicho sea de paso esta mujer tenía trastornos
mentales. Originó este suceso un dicho muy popular:
- Listo el
pollo: dijo Rosa Mejía, cuando le peó los huevos a Goyo.
88. Leandro
Giraldo es quizás el hombre que más le ha gustado la leche de vaca en toda la
historia de la población, tan es así que para no perder tiempo se pegaba como
ternero en la teta del animal. Pues bien, sucede que una vez iba para la finca
“Pacheco”, en el camino le dio sed, de manera que al ver una cuadrilla de
jornaleros desmontando les pidió agua de beber, los señores le respondieron que
el calabazo estaba debajo del palo de Ceiba. Fue así como Leandro, en vez de
coger el calabazo del agua, se empinó en el otro que estaba lleno de leche
cuajá, los jornaleros le gritaban:
- Leandro ese
no es, ese no es.
Cuando
terminó de beberse por completo el calabazo de leche, escupió diciendo:
- Hombe
carajo, si era lechita.
89. Juvenal
Fandiño Rodríguez se casó con Modesta Rangel Barros, pero nunca tuvo que ver
con ella ya que se la pasaba caminando y mujereando, entre otras cosas
enamoraba con secretos. Sucede que tenía de muerta un año Josefita Barros, la
madre de Modesta y el mismo año tenía de ausente Juvenal de su esposa. Como
estaba peleado con Modesta no encontraba la forma de entrar a casa, de modo que
se las ingenió en plena calle con las manos puestas en la cabeza, llorando
duro:
- Ay Josefita
Barros como te moriste sin yo saber nada, ay Josefita Barros tan buena suegra
que fuiste tú conmigo.
90.
Anteriormente, los bailes de sala eran respetables, quien no estaba invitado no
podía asistir. Había entonces un baile en casa de Hermogenito Ospino Vizcaíno,
el doctor Enrique Caballero Lafaurie andaba ese día parrandeando y de pronto se
metió en el baile en el cual no estaba invitando, cuando Hermogenito se dio
cuenta ya estaba gozándola con una buena pareja. Hermogenes de inmediato lo
cogió por el brazo y lo sacó de la casa diciéndole:
- Mi casa se
respeta.
91. Venía
Manuelito Rivera en la tarde de “Las playas”, de pronto en el camino lo cogió
un fuerte aguacero que lo obligó a meterse en una enramada, cuando llegó
también se encontraba Cristóbal “Chova” Páez dejando que pasara el agua.
“Chova” Páez sabía que Manuelito, ordeñaba una vaca de la cual hacía un quesito
en una coquita de molino para el desayuno diario de la casa. Entonces dijo
“Chova”, provocándolo:
- Ahora lloviendo
y con tronco de hambre provoca comerme un pedazo de queso biche.
Manuelito
Rivera se sintió aludido y de inmediato reaccionó:
- Compa
“Chova” la verdad es que el agua no mata a nadie, el que se va soy yo.
92. Sobre el
apodo del pueblo de Cantagallar, realmente
quien se cagó la olla no fue Manuelito Ayo, sino Manuelito Acuña. Los hechos ocurrieron
en un baile de sala, donde un grupo de parranderos raptaron la olla de comida,
y luego Manuelito Acuña, sin misericordia se la cagó de la mejor manera y sin
sobresaltos. Desde entonces a los oriundos de Cantagallar los apodan “Caga Olla”.
93. Los piñoneros,
tienen dos apodos: “Mata en Troja” y “Bota Santo”. El primero porque mataron a
un sujeto en una troja, el segundo porque un cura aburrido echó todos los
santos al Río Magdalena.
94. El hombre
práctico para beber ron fue sin duda “El Viejo” Rangel, padre de Ignacio Rangel
Mendoza, abuelo de Aníbal Rangel Barros. Cuando estaba en el monte sembrando
maíz colocaba en una estaca un calabazo lleno de chirinche, y de aquel lado
dejaba otro calabazo lleno del licor, de manera que no perdía tiempo mientras
iba sembrando en hilera el maíz.
Precisamente
murió en Cantagallar pidiendo ron, después de haber llegado ebrio montado en un
burro procedente del pueblo de Tiogoyo, maltratado por la horqueta del sillón
que se le incrustaba en el estómago. En su agonía no pedía medicina, sino:
- Demen un
trago de ron.
95. Si había una
mujer fregada para hacerle mandados esa era Modesta Rangel Barros. Cuando
mandaba a comprar calillas había que decir que eran para Modesta; si mandaba a
comprar carne había que decir lo mismo, porque calilla y carne que no eran de
su agrado las devolvía.
96. El amor de
“Niñita” Payares con Israel Ospino Vizcaíno, fue grande hasta la muerte y quizás
único en el mundo. A las nueve noches de muerto Israel, murió “Niñita”. No lo
dejó que se fuera solo.
97. Había antes
una cosa muy buena en los colegios, consistía en que el día de las madres y en
los días patrios, los estudiantes debían recitar poesías y discursos. En una de
estas celebraciones participó Rosa Ester Sarabia, que del susto no pasó del
saludo a sus profesores repitiéndole cada rato:
- Señora
Virginia Corbacho, y señor Pérez Meneses; señor Pérez Meneses, y señora
Virginia Corbacho.
98. Igualmente
en este evento le sucedió a Joaquín Varela la misma circunstancia, se trabó en
este verso:
- Desde el
balcón secular, desde el balcón secular, desde el balcón secular...
Amarante
Riqueth Santodomingo, que estaba presente en la ceremonia gritaba angustiado:
- Denle agua,
denle agua.
99. Sucedía que
en tiempos de verano la Ciénaga Vieja ó el Cañito, se secaba casi en su
totalidad. Por esta circunstancia había que hacer casimbas para poder tener
acceso al agua. Rosa Matilde aprovechaba estos tiempos ganándose la vida
haciendo casimbas. Sucede que un día amaneció la casimba de Rosa Matilde con
dos semejantes mojones, que habían sido expulsados por el organismo de Carlitos
“Ariana”, que desde esa época quedó con el remoquete de “El Cloro”.
100. Se encontraba
parrandeando Catalino Rodríguez con Juan “Boquita”, de pronto empezó éste a
ventociarse unos peitos, a lo que le respondió Catalino:
- Juan cuando
yo estaba pelao Rosita mi mamá, me compraba uno piticos como los tuyos y yo los
ripiaba cada rato.
101. En la misma
parranda se hacía el dormido Juan “Boquita”, Catalino Rodríguez, aprovechando
le abrió la corredera e hizo que el pene se le endureciera, de modo que al
pasar Vicente Ramos, Catalino lo saludó:
- Vice por
que no te caes de espalda sobre Juan.
Vicente Ramos
le respondió:
- Ve ahí está tu mae Rosita.
156. Así definía Ignacio Rangel Mendoza los siguientes personajes:
- Ve ahí está tu mae Rosita.
Un avión moderno en Cantagallar.
102. Se
encontraban trabajando los hermanos Vizcaíno Sierra en El Palotal, para esa
época había allí un caserío en donde vivían unos negritos palenqueros. “Niñito”
Vizcaíno refiriéndose a las palanqueras dijo:
- Como habrán
hombres que viven con una mujé de esas.
A lo cual
Juancho Vizcaíno, le replicó:
- “Niñito”,
toó eso se come.
103. Apuñaleó
“Malito” Calvo, a un señor en el corregimiento de Coco Solo, por tal razón fue
puesto preso en la cárcel del Cerro de San Antonio. Cuando sus paisanos fueron
a visitarlo a la cárcel, al preguntarle qué fue lo que pasó, él respondió:
- Dicen que
apuñaleé a un tipo.
Y al
preguntarle de nuevo sus paisanos, que cuándo salía ”Malito” respondió:
- Eso si no
lo dicen.
104. Sucede que Candelaria Pacheco, la
famosa cantora de Pajarito, había dejado unos pescados en la troja del patio de
su casa, los cuales fueron picoteados por las gallinas, delante las narices de
su esposo Bernardo Sarabia, que se encontraba allí cerca desgranando unas
mazorcas de maíz.
Cuando regresó Candelaria, al ver
semejante situación, cuestionó a su esposo diciéndole:
- "Mira Bernardo, tu ahí cerca
de la troja y no ves que las gallinas han picoteaó todos los pescaó; fuera un
culo, ahí si lo vieras".
Bernardo Sarabia sorprendido por el
reclamo de su mujer, le contestó con este término inventado por los
cantagalleros:
- "Uscurú".
105. El barrio de
la familia Pacheco ha sido en la historia el más alegre del pueblo, y esto se
debe a Candelaria Pacheco impulsadora del baile “El Pajarito”. Todas las noches
de todos los meses, se hacían fiestas con tamboras convirtiéndose ese lugar en
el único punto de recreación del corregimiento.
106. Es sin duda
Tulio De La Hoz Barros, el hombre más importante que ha brotado el suelo de
Cantagallar hasta el momento. Las razones son las siguientes:
Ha sido el
hombre que más riquezas ha acumulado.
Fue el
primero que llevó al pueblo un radio.
Fue el
primero que llevó al pueblo un televisor.
Fue el
primero que llevó al pueblo una nevera.
Fue el
primero que llevó al pueblo un carro.
Fue el
primero que compró una casa en Barranquilla.
Su riqueza
fue producto del trabajo honrado.
Fue un hombre
inteligente y de buena conducta.
107.
Atrevidamente estaba Pablito Polo arrancando una mata de yuca en la “Roza” de
“El Docto” Ospino. Sucede que Rosalía Palmera mantenía una amistad muy estrecha
con “El Docto”, y por esta razón acostumbraba siempre hacer sus sembrados al
lado de su amigo. Rosalía, tenía una característica muy especial, consistía en
que no se sentía en el monte; es así que cuando él observa que están arrancando
la yuca, piensa que el hombre es “El Docto” Ospino, de modo que se le va por atrás
muy suavemente con machete en mano para asustarlo juguetonamente diciéndole:
- Buscando
que te moche la cabeza.
Cual sorpresa
sería para Rosalía, y cual susto para Pablito. Rosalía se sorprende porque el
hombre no es su amigo con quien se juega, y Pablito se asusta porque se lo
encontraron con la mano en la masa. Fue una pena para los dos, aun cuando más
para Pablito.
108. Cuando la
creciente grande que hundió El Piñón, muchos damnificados se fueron para
Cantagallar. Los Cantagallero estuvieron prestos ante semejante catástrofe
brindándoles alojamiento a cada uno de ellos, fue así como en unas casas
guardaban mesas, sillas, en otras vivieres, en otras vestidos, etc. Hermogenito
Ospino que siempre las cosas le salen al revés, sobre este acontecimiento expresó:
- Yo si soy
el hombre salao, en mi casa lo único que guardaron fueron dos cajones. Ya esto
es el colmo.
109. Las
“Queseras”, han sido toda una institución en el pueblo, a través de ellas se
hacía el enlace entre Cantagallar y Barranquilla, los habitantes las
aprovechaban para llevar y traer cartas, dinero, abarrotes. Les llamaban “Las Queseras”
porque quienes comercializaban llevando queso a Barranquilla en su gran mayoría
eran mujeres, entre las cuales se encontraban: Sixta Tulia, Alejita, Doris, Hermelinda,
Yomaira, Cornelia. Pero también en el gremio había hombres como: Enrique
Rangel, Joaquín Vizcaíno, Juancito Rada. De modo que tanto a hombres como a
mujeres les tenían el mismo apodo, esto ocasionó que con el tiempo los hombres
se alejarán del arte para que no los siguieran llamando “Las Queseras”.
110. Se
encontraba Josefa Pertúz la madre de Eloísa Noriega en la etapa del caduco, de
modo que todos los días amanecía con una caduquera diferente. Cualquier día
amaneció con el cuento que se le habían perdido unas chancletas, y una franela
que había traído nueva de Barranquilla. Hermogenito Ospino su yerno, que ya
estaba hasta las coronillas de tanta jodedera y caduquera explotó:
- Sí señora
las chancletas se las robó Eloísa, y yo me cogí el corpiño ¿No me lo ves
puesto?.
111. Que será lo
que pasa pero las tiendas propias de Cantagallero no prosperan, quedan en lo
que son, simples “Mosqueros”. Con excepción de las tiendas de Manuel De La Hoz,
Edith Rangel, Emilia Santodomingo, que tuvieron en su época un surtimiento de
víveres más o menos aceptable. Contrario sucede con las tiendas de los cachacos
y forasteros que son las más representativas en el pueblo.
112. En una época
llegaron al pueblo unos misioneros, con la única finalidad de legalizar a
través del matrimonio católico las uniones libres. Utilizaban medios de
persuasión y cuando no podían realizarlo a las buenas, lo hacían a la fuerza.
Sucede que Roberto Ospino Vizcaíno no era buen amigo del matrimonio, vivía en
unión libre con Célmira Gómez, de manera que se encontraban en casa de su tío
Máximo Ospino jugando dominó una bella tarde cuando lo asaltaron los
misioneros. Llegaron con Célmira cogida del brazo, acompañados de Himera
Riqueth y ahí mismo delante los jugadores de dominó lo casaron. Roberto Ospino
no dijo ni mú, su expresión la manifestó con unas buenas lágrimas en los ojos.
Eso sí, más nunca gustó de Himera Riqueth la ideóloga de todo el asunto.
113. Había una
conversa entre los hermanos Vizcaíno Sierra, discutían qué si era más sabroso
el plátano maduro con queso, que el queso con bocadillo. Juancho Vizcaíno que
la boca se le hacía agua expresó con su tono suavezón:
- Lo mismo,
lo mismo, lo mismo.
114. Había una
parranda en casa de Carlos “Hielo” González con la presencia de Argemiro
González, Donaldo Varela, Oswaldo González, Carlos Varela, entre otros. De
pronto dijo Donaldo:
- Muchachos
no les provoca un sancochito de gallina.
Todos los
allí presentes le creyeron porque Donaldo es muy experto en robar gallinas. Así
fue, a la media hora se presentó con dos bonitas gallinas ya muertas. Se hizo
el sancocho, siguieron bebiendo, pero lo curioso del caso fue que Donaldo no
quiso comer. Al día siguiente él mismo se encargó de regar en el pueblo la
maldad que les había hecho a sus amigos, pues las gallinas sancochadas las
había encontrado guindadas en la cerca del sitio “El Brujo”, muertas de peste.
115. Salió un
grupo de cantagallero a trabajar en la Sierra Nevada de Santa Marta, entre
ellos estaban: Juan Jiménez, Hermogenito Ospino, Joaquín Ospino, “El Cariaco”,
“Uribe”, etc. Llegaron al Paseo Bolívar de Barranquilla con sus machetes
envueltos en telas, sus pellones y mochilas lo que ocasionó que los
Barranquillero, se burlarán gritándoles:
- Corronchos,
corronchos.
“El Cariaco”
se enfureció respondiéndoles:
- Y ustedes
que son una partía de rateros.
Lo bueno del
caso fue que duraron dos meses en la Nevada, y fueron los mismos que duró
Hermogenito Ospino sin bañarse.
Estando en la
Sierra Nevada “El Cariaco” hizo celebre la frase:
- Oye como
suena el Marrrrdalena y el Cauuuca.
116. Las madres
cantagallera para dormir ó arrullar al niño, le cantan estos versos:
Duérmete
niño, duérmete tú
Hasta que
venga, el currucucú.
Este niñito
no quiere la teta,
Lo que quiere
es arroz con manteca
Papá José, tiene
dos vacas,
Una en
Colombia y otra en Caracas.
117. Angito
Arévalo era un loco que se la pasaba caminando de pueblo en pueblo. Al
preguntársele qué horas eran siempre respondía:
- Las doce y
un trozo de yuca.
118. La Barra
Peligrosa era una agrupación de parranderos, que se metían en todos los bailes
así no fuesen invitados. Tenían una mala costumbre se robaban los sancochos de
las fiestas. Hacían parte de esta barra Robertico el “Chucho” Ospino, Ascanio
Riqueth De La Hoz, Catalino Rodríguez, Germán Ospino Gómez, entre otros. Fue
Ascanio Riqueth De La Hoz quien compuso la famosa canción:
En
Cantagallar, en Cantagallar
hay una barra
peligrosa
confianza no
se les dá
porque se
roban las cosas.
119. América
Rangel es la esposa de “El Docto” Ospino. De manera que al preguntarle en clase
la profesora Magali Valle a Pedro Juan Santodomingo, quién había descubierto la
América, éste respondió:
- El “Docto”
Ospino.
120. Le prestó el
profesor Miguel Pérez Meneses un burro a Daniel Juvinao con el ánimo de ir a El
Piñón. Cuando se encontraba el profesor por la finca “El Bongo” prendió un
fuerte aguacero, de esos del mes de agosto que vienen con rayos y centellas.
Ocurrió algo insólito: una fuerte centella cayó sobre los dos seres, quedando
el burro muerto y el profesor Pérez Meneses vivo.
Tiempos
después, una centella mata a Toñito Riqueth Santodomingo dejando a su caballo
vivo. Pero a los pocos días otra centella, mata al pobre caballo.
121. Se
encontraba Hermogenes Riqueth Ospino trabajando en la finca “El Mono”, a eso de
las ocho de la mañana llegó su padre con el desayuno, dejándolo bajo un
frondoso árbol de mamón. Se acostumbraba entonces a envasar el café con leche
en botella, de modo que Issio el padre de Hermogenes, llevó consigo una botella
de Copertó para bañar al ganado. Lo anecdótico del caso fue que Hermogenes al
momento de ir a tomar el desayuno, en vez de coger la botella de café con
leche, se empinó fue la de Copertó, lo que casi le ocasiona la muerte.
122. Le dijo
Manuela De La Rosa, a su hermana “Talla”:
- Ay “Talla”
tengo la cabeza atoctolá. ¿Cuánto son cincuenta y diez?
Su hermana de
inmediato le respondió:
- Ay mija,
cuánto más van a sé, cincuenta y diez.
123. Un 20 de
enero seguían parrandeando Eusebio Rangel De La hoz, Carlos Ospino Vizcaíno,
Catalino Rodríguez, y otros más. Pero ya se les había acabado la plata y la
única tienda donde había ron era la de Manuel María De La Hoz, que este
artículo no lo fiaba. Manuel María De La Hoz cuñado de Eusebio Rangel, pero
para la época estaban bravos. De modo que a Eusebio se le prendió la chispa
dándole estas instrucciones a Carlos Ospino Vizcaíno:
- Ve donde
Manuel con estas tres tusas cruzá, al momento de llegar las dejas caer en la
puerta de entrada, de inmediato le das tres golpes al mostrador y enseguida le
dices que mandé a decir yo que me fíe tres botellas de ron.
Carlos Ospino
Vizcaíno copió al pie de la lo letra las instrucciones y quedó sorprendido
cuando Manuel De La Hoz, lo quedó mirando un rato absorto y le entregó las tres
botellas de ron.
124. Iba Aurelio
Villa Labarcés en su mulo por la vía del puente de Caño Ciego, en el Cerro de
San Antonio. De pronto en el camino un lobo muerde la pata del animal, lo que
ocasiona el espanto del mulo y por consiguiente la caída al suelo de Aurelio.
Lo sorprendente del caso fue que el mulo de inmediato empezó a darle golpes con
los cascos a Aurelio Villa, lo que le ocasionó la muerte instantáneamente.
Aurelio Villa
Labarcés era un Coronel del ejército que se había enfrentado a bala en un duelo
pactado con el Capitán Eusebio Rangel Mendoza en la cabecera municipal de El
Piñón. En dicho duelo ocasionado por problemas de mujeres, resultó muerto el
Capitán Rangel.
125. A comienzos
del siglo XX llegó a El Piñón, procedente de Ciénaga Magdalena, Maximiliano
Schiller, un ingeniero alemán que se radicó en la población comprando unas
hermosas haciendas. Maximiliano Schiller luego de la muerte de su esposa en
Ciénaga, contrajo por segunda vez matrimonio con la piñonera Concepción De La
Hoz, de cuya unión hubo seis hijos: Maximiliano, Miguel, Valentín, Rosalvina,
María y Teotiste.
La primera
tarea de este osado ingeniero en la población fue abogar ante las instancias
gubernamentales para canalizar un caño que naciera de la margen izquierda del
río Magdalena entre los distritos de El Piñón, Cerro de San Antonio, hasta
encontrarse con el lecho del Caño Ciego, que se encontraba en estado de
sedimentación. Aproximadamente 5 kilómetros de canalización entre el antiguo Caño Chiquía,
a orillas del Río Magdalena y Caño Ciego en el corregimiento de Cantagallar,
fue lo que contrató Maximiliano Schiller en el año 1915. Lo curioso de la
estadía de Schiller en El Piñón es que es asesinado, cobardemente por cinco
balazos en la espalda a la entrada del portón de su casa cuando se bajaba de su
caballo, por meros cuentos y cizañas pueblerinas, y por cosas que él nunca
dijo, y lo peor, ni supo. Sucede que Juancho Pérez Visbal estaba enamorado de
una de sus bellas hijas, jóvenes educadas en Alemania y de buenos modales; pero
ese enamoramiento la chica, ni el padre lo conocían, porque Juan Pérez Visbal
sólo lo comentaba a sus amigos, nunca tuvo el valor de manifestarlo
personalmente. Ocurrió lo inesperado en una cantina cuando llegaron dos
borrachos amigos de Juancho Pérez y le dijeron:
- ¿Tú crees
que Maximiliano Schiller va a permitir que su hija se case con un campesino
como tú?
- Tú crees
que va aceptar tener en su casa, una abarca y un zapato?.
La ofensa de
los amigos recayó sobre Maximiliano, que dicho sea de paso, era como un padre
para él.
126. Ocurría
anteriormente que cuando se pedía la mano de una mujer, su novio desde ese
momento no la podía ver más, sino hasta el día de la boda; y la novia era
sometida a un entrenamiento de trabajo, como lavar, planchar, pilar, en
jornadas arduas, por parte de los padres. Así le ocurrió a Petronita Díaz,
cuando fue pedida por Juan González.
127. Ocurría
también que la mujer que salía “panameña”, es decir que no estaba señorita al
momento de casarse, era devuelta por su prometido. Devolución que se hacía a
través del Inspector de Policía.
128. Ocurre que
Esteban Muñoz hijo de Rosalía Muñoz con Dionisia De La Rosa Pacheco, se fue a
trabajar al corregimiento de Charanga, y allá le quitó la mujer a un señor
trayéndosela para su pueblo Cantagallar. A las dos semanas siguientes llegó el
pobre hombre dejado donde el inspector Joaquín “El Docto” Ospino para que le
hiciera el favor de hablar con Esteban, para que le devolviera su mujer la cual
tenía dos niños con él y no tenía quien se los cuidara. El inspector hizo la
diligencia y esa misma tarde el hombre de Charanga, viajó a pie con la
reconquista de su esposa.
129. Las
adivinanzas y las penitencias tenían mucha importancia en el pueblo, al igual
que los juegos como el Palito en Boca; consistía este juego, en tener siempre un
palito en la boca, de lo contrario perdía lo apostado. El juego La Libertad,
consistía en quien llegase a un poste determinado estaba libre. El juego El
Cigarrón sin Chuela, consistía que la persona era amarrada donde se encontrase.
Otros juegos eran Pícate la Culebra, el Palo e Yuca.
Además de la
famosa jerigonza que consistía en hablar enrevesado, con muchas vueltas, así
por ejemplo:
- Cofomofó
tefé llafamafá tufú.
Se respondía:
- Yofomofó
mefé llafamofó rafaufulofó ofospifinofó.
130. Se bebía el
ron a pico de botella y había que pagar la hora de Picos, equivalente la hora a
20 rayitas, las cuales eran anotadas en un cartón. En las esquinas se hacían
parrandas con radiolas. Fue la casa de la familia Vizcaíno Rojano, epicentro de
parrandas amenizadas por Andrés Landero, Alejo Durán, que le seguían los pasos
a la supuesta clarividente Elena, mujer que llegó al pueblo y posó en casa de
la mencionada familia. Muchos fueron los engañados por la supuesta bruja, que
el día que se fue se llevó cargados diez burros con gallinas, cerdos, perros, y
demás.
Con ocasión
de la estadía de Andrés Landero, compuso en Cantagallar la melodía “Las Miradas
de Magalis”, dedicada a la profesora Magalis Valle. Hay que anotar que Landero
saludó en sus hermosas canciones a Catalino Rodríguez y Pepe Riqueth De La Hoz.
131. Tiempos aquellos
en donde se arrancaban las casas y eran trasladadas en hombro a otro sector del
pueblo, y se dormía con las puertas abiertas por que no había rateros. Sólo
Juan Cantillo tuvo la osadía de bajar de la hamaca a Álvaro Ospino Rangel, el
cual estaba durmiendo, para cambiarla por ron.
132.
Tradicionales fueron los carnavales que se festejaban en salones construidos
con paja, en donde se bailaba con capuchones. A los hombres encapuchados los
llamaban Caporos, y a las mujeres Monas, y había que pagar por cada canción
bailada.
Cosa
contraría sucedía en Semana Santa, en donde no se podía oír música popular,
sino la clásica; no se podía montar en burro, ni ir al monte; como tampoco se
podía hacer el amor, porque corría el riesgo de quedar pegado. Las conservas,
el pescado, la chicha y el arroz con leche, eran comidas de estos días.
133. Tradicional
fue también el Pajareo, la Bola e’ Candela, pateada del ocho de diciembre, la Viranga
en los velorios, la piñata del treinta y uno de diciembre, el baño de 20 de
enero, que aún se conserva.
134. Llegó Pedro
“El Turco”, a casa de Eusebito Vizcaíno, burlándose:
- Eusebito,
llegó tu cavador.
De inmediato
Eusebito, le respondió con picardía:
- Bueno
Pedro, yo soy el asta.
Pedro “El
Turco” le replicó:
- ¿Y por qué
el asta Eusebito?
Eusebito le
explicó:
- Porque el
asta, va enterrao’ dentro del cavador.
Pedro “El
Turco”, cambió de opinión diciéndole:
- A no
Eusebito, entonces yo soy tu asta.
135. Había tenido
encontrones callejeros Eduardo Sarmiento con Joaquín Varela y Eusebito
Vizcaíno, de manera que Eduardo Sarmiento en sus borracheras deliraba diciendo:
- Lo matés,
matés al “Tigre del Bochinche”, y matés al “Tigre de la Malena”. El “Tigre de
la Malena”, de acuerdo a Eduardo era Joaquín Varela, y el “Tigre del Bochinche”,
era Eusebito Vizcaíno.
136. En cierta
ocasión Eduardo Sarmiento borracho, fue azotado en horas de la noche por
desconocidos, él comentaba después que todo eso había sido cosas del diablo.
Más tarde se confirmó que la paliza de que fue objeto Eduardo, la habían
propinado los hermano Pedrito “Cuco” y Benjamín Rodríguez, quienes ya estaban
cansados de tantas trasnochadas por culpa de él. Sucede que Eduardo Sarmiento,
tenía la mala costumbre que en sus borracheras nocturnas se la pasaba gritando
por todo el pueblo.
137. Clara Ospino
Calvo es poca amante a dar pésames, de modo que Nubia su hermana, siempre la
regaña diciéndole:
- El día que
tú te mueras nadie va a ir a tu velorio.
Clara Ospino
jocosamente le responde:
- Por el
contrario al mío es que van a ir, y al tuyo no.
Nubia le
pidió explicación del caso, a lo que Clara manifestó:
- Es que si
yo me muero la gente va por consideración contigo, en cambio si tú te mueres
nadie me da el pésame a mí.
138. Han existido
varias formas de enamorar en el pueblo. En un comienzo se enamoraba con
piedrecitas, consistía esto en que el hombre le tiraba una piedrecita a la
mujer, si ella la devolvía era prueba de que le gustaba, y el hombre debía ir a
casa de la muchacha a ponérselo en conocimiento a sus padres.
Luego vino la
época en que las mujeres usaban un vestido con una larga cola hasta el tobillo,
el hombre la enamoraba pisándole la cola, también si ella gustaba debía el
hombre ponerlo en conocimiento de los padres.
Más tarde llegó
el enamoramiento por cartas ó papelitos, si la mujer estaba de acuerdo era
obligación responderlas, si no las devolvía sin ninguna consideración. En todos
estos casos las visitas se hacían en presencia de los padres, ellos sentados en
el centro, y los novios a los extremos.
139. Una
modalidad poco agradable ha sido el casamiento a la fuerza. En algunos casos
las parejas han tenido éxito, pero en otros el novio sale por una puerta, y la
novia por la otra, como le sucedió a Rafita Jiménez, con la hija de Lorenza
Blacho.
Hubo una
época en que el hombre escupía a la mujer, cuando no quería hablar con él, ó
cuando la enamoraba y esta no le paraba bolas.
140. Acostumbraba
“Joche” Rada madrugar para las Playas, cuando pasaba por el arroyo de “La
Esperanza”, se sorprendió porque había un hombre amarrado sobre el tronco de un
árbol de Trupillo. Se bajó del burro para socorrer al infortunado que estaba
sin camisa picado de mosquitos y helado del frio. El hombre era Solange Díaz
Vizcaíno, que la noche anterior había sido amarrado por sus amigos del juego
“El Cigarrón sin Chuela”, este juego consistía en que había que esconderse para
no ser atrapado, y aquel que lo fuese de inmediato era atado en el lugar que se
encontrase sin importar el tiempo, y dejado allí a la buena de Dios.
141. Enamorado
estaba Leopoldito Varela García en el corregimiento de Chengue, allá para
impresionar al padre de la muchacha le dijo que él tenía un burro Cho, de buena
cría en su pueblo Cantagallar, y que lo tenía a la venta. Pues bien el señor de
Chengue, buen gustador de esta clase de animales a la semana siguiente fue a
verlo en la finca Santa María. Leopoldito para que no lo cogieran en el embuste
preparó el escenario: puso unos pelitos de burro encima del alambre de púa,
aflojó la cerca, y cuando el comprador le preguntó por el animal de esta forma
respondió:
- Mire que
cosa, este animal por aquí fue donde se salió, y fíjese usted como está de
montañoso el terreno del vecino que para entrar ahí es difícil.
142. Juvenal
Fandiño con el fin de crear pleitos jurídicos sobre los bienes de su esposa
Modesta Rangel, le mandó a decir a Aníbal Rangel Barros que buscara abogado, porque
él ya tenía el suyo. Aníbal Rangel, con el mismo mensajero le respondió:
- Dígale a
Juvenal Fandiño que el abogado mío lo tengo metido aquí en la mochila.
Se trataba
nada más y nada menos que el revolver 38, que acostumbraba usar Aníbal Rangel
en la mochila. Fue lo suficiente para que Juvenal se quedara quieto.
143. Llegó
“Rangelito” donde su hermano Aníbal Rangel, con los ojos hinchados de una
paliza que le había dado un hombre en el corregimiento de El Playón de Orozco.
A esa misma hora Aníbal Rangel ensilló un burro y se fue por el desquite, al día
siguiente regresó bebiendo ron porque había noqueado al adversario de su
hermano.
144. Cesar Rangel
Potes sólo duró tres días como inspector de Cantagallar, lo destituyeron por
que el puesto le quedó grande.
145. Sucede que
los ganglios se hinchan cuando una persona tiene infección en la piel, a ese
hinchamiento en Cantagallar lo llaman “Seca”, y la cura que utilizaban los
viejos era un rezo en cruz que decía así:
- Cuando
Cristo nació
“Seca” no
había,
que muera la
“seca”
y viva María.
146. Encontró
Raúl Ospino Vizcaíno a José “Rabo Pelao” Ospino Calvo y a Hermogenito Ospino
Vizcaíno, con una pea de tres pisos trasbocando. Al verlos en semejante estado
el Doctor Ospino les reprochó:
- Carajo
ustedes no beben para divertirse, si no para matarse.
147. Se realizaba
una cazeta en Cantagallar, cuando la gente bailaba alegremente se formó una
discusión, fue entonces cuando se le ocurrió a Carlos Julio Noriega calmar los
ánimos y sin pensarlo dos veces se metió por encima de la camisa un revolver y
gritó:
- Apártense,
que aquí va haber plomo.
La
muchedumbre corrió despavorida dejando la cazeta vacía. Carlos Julio Noriega se
apartó hacía una esquina sin percatarse que fue seguido por su sobrino Rafael
Noriega Calvo, el cual de un tirón le sacó lo que llevaba escondido, pero cuál
sería la sorpresa que el arma se trataba de una pata de muñeca.
148. En el
Cantagallar antiguo, los ahijados agachaban la cabeza para que el padrino les
diera la bendición, después de esta reverencia le besaban la mano. Al momento
del bautizo si el padre del joven aceptaba, lo bautizaban con el apellido del
padrino. Sobre este particular Raúl Mosquera quiso bautizar a Raúl Ospino
Vizcaíno con su apellido, cosa que le impidió Hermogenes Ospino Pacheco, que al
final sólo aceptó que le pusieran el nombre.
149. Las
creencias o zetas, han tenido un protagonismo en la cotidianidad de la
población, he aquí algunas de ellas:
- Cuando una
mosca aletea en la cara de una persona, eso significa que le van a llegar
cartas ó noticias.
- Cuando un
cigarrón vuela dentro de la casa, es evidente una visita.
- Cuando un
perro aúlla, es síntoma de muerte; igual sucede cuando un golero se para sobre
la iglesia.
- Cuando el
ojo de una persona brinca es que va a ver a alguien que hace rato no ve.
- Cuando se
conversa sobre brujerías, hay que cruzar las piernas.
- De noche
para que las brujas no entren al cuarto de los niños, se coloca debajo de la
hamaca ó cuna de este, el sombrero del papá boca arriba; con este sombrero no
se puede soplar el fogón.
- Igualmente
al acostarse los taburetes los voltean contra la pared, para que los espíritus
no se sienten.
- Cuando le
rasca la mano derecha a una persona, es prueba de que va a recibir plata; pero
cuando le rasca la mano izquierda, es porque va a tener un cobro.
- Cuando el
marido está ausente, le rasca el pico del seno a la mujer, es prueba que donde
esté la desea.
- El canto
del pájaro Guacavó también significa muerte.
- Se tiene la
creencia que de noche los muertos se van para la iglesia, y los santos se van
para el cementerio.
- Es mal
agüero entrar con un paraguas abierto, o con un sombrero puesto a una casa;
como también es mal agüero pasar por debajo de una escalera.
- Cuando la
mujer está embarazada para adivinar el sexo se coloca una tijera debajo de uno
de los taburetes de la sala, si la visita que llega es un hombre y atina a
sentarse en uno de los turbantes donde está la tijera, el bebé al nacer es
macho, pero si la visita es una mujer y atina a sentarse en dicho mueble donde
está la tijera, el bebé al nacer es hembra.
- Otras de
las creencias del pueblo radica en que es malo burlarse de una persona, porque
está sujeta a que le pongan un mal, como le sucedió a Zenobia.
- Es mal
agüero regalar lo regalado, porque se le daña la suerte.
- Para el mal
de ojo de los niños no hay remedio médico que lo cure, solamente se cura con
rezos.
- Cuando un
animal, ó un sembrado tienen gusanos, se le aplica el secreto del gusano y al
día siguiente desaparece.
- Los muertos
no hay que enterrarlos al revés porque se corre el riesgo que se lleve a
varios; la fórmula es enterrarlos con la cabeza viendo para el monte.
- Si quieres
tener prosperidad debes tener tres morrocoyos en la casa, preferiblemente uno
comprado, uno regalado, y otro robado.
- Cuando el
oído zumba, es porque están hablando para bien, o para mal de la persona.
- Con los
remolinos de viento que salen en tiempo de verano, se cree que son
manifestaciones del diablo.
- Cuando dos
pollitos están pico con pico, es porque va a ocurrir un matrimonio.
- Cuando una
mariposa de color negro entra a la casa es presagio de muerte familiar; pero si
la mariposa es de colores, esto significa regalos, alegrías.
- Cuando una
mujer sube el piso de la casa anteponiendo primero la pierna izquierda, es
prueba que esta señorita; pero si la mujer coloca primero la pierna derecha,
quiere decir que ha perdido la virginidad.
- No se puede
estar despierto a las doce de la noche por que llega la mala hora.
- octubre los niños que no estén bautizados las
brujas les chupan la sangre.
- noviembre en horas de la noche, las ánimas
salen a caminar las calles del pueblo con velas encendidas, al encontrarse una
persona le dan una vela para que la lleve al cementerio, la persona no cumple
la misión porque se priva.
150. En las
esquinas del pueblo no falta un piropo como los siguientes:
- Adiós
corazón de oro, tu eres la vaca y yo soy el toro.
- Oye mujer,
me tienes el corazón vuelto un chiquero de puerco.
- Adiós
flaca, tírame un hueso para hacerme un dije.
- Si como
caminas cocinas, yo me como hasta el cucayo.
151. Las
adivinanzas hacen parte de la vida del pueblo como estas:
- Mi comadre
la negrita, cuando la aprietan grita.
- Lo meto
zumbando y lo saco goteando.
- Agua pasó
por aquí, cate que no lo vi.
- Torón que
anda, gil que camina.
- Arriba de
una loma está una pava echá, llueva o no llueva, está mojá.
152. Penitencias
famosas las que hacía “Chefita” en casa de los Salinas. Abría el juego
diciendo:
- Vamos a
prepará un sancocho, yo soy la carne, ¿Tú que eres?
Respondía el
otro
- Yo soy la
yuca.
Y así
sucesivamente cada uno de los participantes iba diciendo el ingrediente del
sancocho. Cuando una persona no encontraba qué decir se le ponía una
penitencia.
153. Refiriéndose
a Toño Villa Carbonell, así se expresó Foción Cormane Santodomingo:
- Es que Toño
no es bueno con el machete, pero sí es bueno con el cachete.
Entonces Toño
Villa Carbonell, le mandó a decir:
- Dígale a
Foción Cormane Santodomingo que él es maestro de escuela y no le enseña la
tabla de restar a los niños, por no decir: quien debe tanto y paga tanto, resta
tanto.
154. Ese día
amaneció Manuela Bolaño de mal humor, fregándole la paciencia a su marido
Dionisio Vizcaíno. De tanta cantaleta le sacó la piedra, lo que ocasionó que su
marido le diera una trompada en el ojo y la tumbara sobre el fogón. Manuela
Bolaño, en el suelo ripostó:
- Desgraciao,
hijueputa, Malpario, estoy privá, lo que veo es humo.
Entonces
Dionisio Vizcaíno, le contestó:
- Te jodí, porque
me tenías la sangre hasta el carajo.
155. Sucede que
Rafael Rudas era poco amante al trabajo, de modo que Ignacio Rangel Mendoza y
Amarante Riqueth Santodomingo, le mandaron a su esposa Zoila Riqueth el
siguiente papelito:
- Señora
Zoila Riqueth, mujer de hierba no la corta: por medio de la presente te
solicitamos nos hagas el favor de fiarnos una botella de ron.
156. Así definía Ignacio Rangel Mendoza los siguientes personajes:
- Rafael
Rudas: El diablo que lo sacuda.
- Pérez
Meneses: Si no se menea no me parece.
- Andrea
Pote: De garrapaticida.
- Ignacio
Rangel: No se metan con él.
- Amarante
Riqueth: Primero mando yo, y después manda Usted.
157. Tenían Juan
y Agustín Rada, padre y tío respectivamente de Juan Rada Pérez, un estanco en
El Piñón, donde producían licor y chicha como llamaban antes. Acostumbraban
estos señores a dejar una cántara diaria para el consumo de los trabajadores y
pobladores, pero sucede que cualquier día se aburrieron de estas donaciones y
ocurrió lo impredecible; cuando transportaban las cántaras en una canoa para el
comercio al otro lado del Río Magdalena, se hundió la embarcación con toda la
producción. Esto desde luego fue un mal presagio o castigo del supremo, lo que
obligó a los propietarios a seguir dejando la cántara diaria para el consumo
del pueblo.
158. Instalaron
en El Piñón un “Puesto de Monta” con el fin de mejorar el cruce de animales.
Sucede que llevó el señor Calazán Melo, una burra baya para que la montara un
burro catalán. Quiso el señor Melo, ayudar a la burrita aguantándola para que
el macho no la maltratara, ocurriendo que el peso del animal provocó la muerte
instantánea de su burra.
159. Salió
“Echandía” Crespo a bañarse al puerto la Sanaguare, con tan mala suerte que en
el momento del baño le dio uno de sus frecuentes ataques, cayendo de inmediato
de bruces sobre el agua y ahogándose en el acto.
160. Tuvo El
Piñón un poeta muy destacado llamado Isidro Valencia, que dejó estos versos
para la historia:
- La pobreza
es un borrón.
que a todo el
mundo oscurece,
el pobre
aunque noble sea
no lo ven
como merece.
161. Sucede que
por cosas de pelao, Carlitos hijo de Marina Ocampo, lo encontraron debajo de
Hernán hijo de Rosamelia. Esto provocó la ira de Marina, que lo guindó, y con
un tizón caliente le quemó las nalgas.
162. Llegó a
Cantagallar un “Médium” de San Gregorio Hernández, que instaló un altar en el
barrio El Bochinche. Para llegar al lugar las personas debían estar sin ninguna
clase de prendas, ni botones, ni correderas. Lo cierto del caso fue que
centenares de creyentes asistían al altar, y allí algunas se privaban. Sucede
que llegó “Chefita” a la romería y en el momento de su llegada se encontraba la
hija mayor de Cornelia poseída por el espíritu e impidió la entrada de aquella
gritando: - No la dejen entrar, no la dejen entrar, que “Chefita” es bruja.
Ese mismo día
“La Mona” hija de “Malito”, caminó las calles del pueblo de espaldas, también
poseída por el espíritu. Lo cierto del caso fue que llegando a la casa de
Modesta Rangel, cayó sobre el zanjón y allí despertó de su estado. Años más
tarde cuando murió “La Mona” fue sepultada en medio de una parranda.
163. El diablo
era temible en los niños de aquella época. Sucede que Nacho Vizcaíno Palmera
hijo de Eusebio Vizcaíno Sierra con Candelaria Palmera, le salió con unas
groserías a sus padres. Al día siguiente le tocó a Nacho llevar unos animales a
la finca El Chichón, pero en el camino le salió el diablo encapuchado
propiciándole una “limpia” con una vara de totumo. Este hecho escandalizó y
atemorizó más a la población. Con el tiempo se supo que el diablo encapuchado
era nada más y nada menos que Julio Carranza, vecino de la familia Vizcaíno que
castigó al joven por su mal comportamiento con sus padres.
164. En una época
en horas de la noche y madrugada a las casas le tiraban piedras, sobre todo
aquellas de techo de zinc. También se decía que eran cosas de diablo, del
espíritu de Lara, de las ánimas de “Fico”.
165. Juan
Bocanegra era un hombre buen bebedor de ron, no había día que no emborrachara,
de modo que su mujer Bernavela, estaba preocupada por esta situación e intuía
que a su marido le había echado algún mal. En cierta ocasión llegó Ignacio
Rangel Mendoza a visitarla y después del saludo le preguntó por su marido
Bocanegra. Bernavela le respondió:
- Ay compa
Ignacio, ahí está borracho, yo creo que eso es un ron echao.
Ignacio
Rangel, con burla le ripostó:
- Sí
Bernavela, echao en el vaso.
166. Resulta que
en diferentes ocasiones Naida Rada perdió el año escolar. “Joche” Rada su padre
no daba su brazo a torcer, y sobre este particular le manifestó a su hija:
- Bueno vamos
a ve’ quien se cansa primero, si tu perdiendo el año o yo gastando plata.
167. En épocas
pasadas cuando había mucha familiaridad o amistad entre personas se usaban los
siguientes adjetivos: a los hombres se les anteponía el “Mano” y a las mujeres
“Mana”. Siendo “Manito” y “Manita” el diminutivo de las anteriores.
168. Y como dijo Ignacio Rangel Polo, hijo del finado "Rangelito":
Ahora utilizo un esfero
Me detengo un momentico
Hombres inteligentes
Antiguo peso de palo.
- Esa mujé es más mala que la mula que le comió la hierva a Jesucristo.
PORONGOS EN CANTAGALLAR.
Lo que les
voy a contar
Va a
causarles terronera
Por la tanta
poronguera
existente en
Cantagallar,
enseguida voy
a empezar
con Toñito,
el Niño Perro
encontramos a
Los Hierros
al Pipio con
Machacón
cerramos este
renglón
con Kalimán y
Will Crespo
II
Aquí vive
Félix Blanco
El Niño Ven y
Vizcaíno
El Foco,
también Camilo
El Cheque,
Adán y El Baco
Toño, El
Pijao y Barranco
inminente
están quedaos
El Tanque y
El Colorao
Cesar Calvo
con El John
Y continúa la
procesión
con otros que
no he nombrao
III
Sergio y
Tulio González
El Cacharo
con El Guille
conforman
este desfile
como fichas
principales,
según los
datos legales
encontramos a
Martín,
José,
Fernando y Memin
lo mismo que
Carlos Díaz
sin que a uno
todavía
le conozcan
peluquín.
IV
Por las
calles caminando
en busca de
solterones
encontramos
estos señores
Marcelino,
Pillo y Donaldo
al Meno con
Heder Calvo
también a
Marquis Rojano
Movilla y
Guillo de manos
sabrosos
pasan la vida
con el Wilson
de Nativa
el tiempo les
corre en vano
V
En esta lista
no escampa
El Toyo con
El Dalmiro
Vivian y
Máximo Ospino
con Ricardo
Salamanca,
Juan Kelly
con Bisagra
Pello, Papa y
El Burrito,
El Gato con
Juancho Mico,
Pedro Johnson
y Coroncoro
todos estos
son apodos
Niño, Minga y
Manco Quico.
VI
Se me
escapaba Perico,
Juan Matute
con Pinzón
se suman a
esta reunión
Pello Juana y
Juancho Nico,
Eligio el de
Mano Mala
y la lista
aquí no acaba
José Rojano,
Geño y Pirringo
con Nadín
fácil ganarse un bingo
que compartir
una cama.
VII
Ahora voy a
citar
a las mujeres
quedadas
que no han
querido por nada
un compañero
buscar
de una voy a
empezar
con Etilvia y
con Leonor
La Yoli y
Marle Monzón
Naraides con
Margarita
La Chichi con
Josefita
conforman
este renglón.
VIII
Aquí se
encuentra Inesita
La Niña Mena
y Lucero
Libia, Alexis
y Consuelo
La Celdri con
La Negrita
Y que ninguna
se omita,
La Niña
Carmen, Almario,
Las Mellas de
Rosarito,
La Cuchi,
Kety y Johana,
Maud y Sonia
con cana
Y para
Yomaira es un mito.
IX
En este verso
chiquito
incluimos a
La Muda
a Diana, a
Yeni sin duda
y a Delia la
de Juancito.
aquí termina
mi canto
a las mujeres
solteronas
que ya les
pasó la hora
y seguirán
vistiendo santo.
A MI PUEBLO CANTAGALLAR.
Con sus casas
de bahareque
de aquel
tiempo pasado
solo queda
algún pereque
de un pueblo
que ha progresado
a todos nos
ha dejado
recuerdos
imperecederos
del PALOTAL y
EL LUCERO
esos montes
concurridos
lástima que
se han ido
sus dueños pá
otros senderos.
Ahora utilizo un esfero
pá escribir
de todo un poco
de sus
personajes, de sus locos
de cada cosa,
yo quiero
por ejemplo
me refiero
para ser más
exactico
a CONCE,
SALO, y ANGITO
orgullos de
la región
no podía ser
la excepción
la llegada de
VICENTICO.
Me detengo un momentico
pá recordar
de lo nuestro
las casimbas
del CAÑITO
parrandas de
los maestros
esos queridos
ancestros
de respeto y
jerarquía
de temple y
filosofía
de gran
comportamiento
que vivieron
aquel tiempo
abuelos de
mucha cría.
Hombres inteligentes
de mucha
sabiduría
no nacen
todos los días
esto si me
pertenece
ejemplo:
PÉREZ MENESES
ahora cuanto
no valdría
vivió en mi
pueblo un día
nos dejó sus
enseñanzas
la cual hoy
es añoranza
de esos
tiempos, de esos días.
Buenas noches. Quisiera saber si la foto de la mudanza de casa (cargando el techo) es suya y de lugar y año es.
ResponderEliminarSaludos.